El contenido literario de este blog está registrado en Safe Creative

El contenido literario de este blog está registrado en Safe Creative
Mis mejores deseos para ti y los tuyos, amable leyente, ahora y siempre

jueves, 28 de mayo de 2015

Este jueves: "Hablemos del destino"

    Hoy jueves, es nuestro compañero Pepe quien nos recibe en su blog Desgranando momentos para “hablar o fabular” sobre el Destino.

Mi aportación no es un relato o un poema, ni siquiera una reflexión serena: es un capricho delirante, escrito a vuelablog; y, por lo tanto, quizá su factura sea demasiado diletante.



Si pulsas sobre este enlace accederás al resto de aportaciones jueveras.




Gracias, Pepe.




This image appears on the Internet credited as Boy_meets_Girl_1_by_shinana


350

Todos somos víctimas y beneficiarios de las casualidades. Empezando por Fleming –y la penicilina– y acabando en mi rellano –y con mi vecina–, nuestros encuentros y desencuentros bailan al compás de la música del azar.



Nos rebelamos ante la certeza de saber que la vida puede cambiar en un segundo. En nuestra guerra contra el determinismo, nos fortificamos tras los muros del “querer es poder”.

No tengo duda de que la voluntad cimienta en su presencia murallas que se desmoronan en su ausencia. Y es innegable que cuando el atrevimiento pasa de las palabras a los hechos puede dar comienzo una era de prodigios; o, al menos, una sucesión de momentos en los que nos maravilla la capacidad de la determinación para convertirse en superación o en excelencia.



Nuestras sociedades se articulan sobre la quimera de que la voluntad puede doblegar a la realidad, en un pulso en el que no cuentan cuánto lo intentes, sino cómo lo cuentes. Y como la Historia siempre la cuentan los poderosos, a los humildes sólo nos queda el consuelo de que nuestro esfuerzo tendrá su recompensa cuando el Destino nos alcance. Pues como buenos hijos del caos, sabemos que el desorden y los impulsos foguean nuestros instintos; y también explican las gestas resultantes de nuestro ceñir por la cintura la voluntad ajena. 


Esa valentía de afrontar la locura de enfrentarnos a lo imposible, explica nuestro acercarnos a una pelirroja peligrosa, el anhelar tocar la Luna con los dedos o el sudor frío en una noche tórrida.

Llevado a lo cotidiano, uno no sabe la sorpresa que le espera al torcer una esquina. Uno no elige de quien se enamora, pero agradece al Destino el placer que pone a su alcance. Pocos imprevistos nos hacen creer en la predestinación con más pasión que el amor. ¿Y acaso existe algo más inexplicable y maravilloso que este sentimiento?


No faltan incrédulos en el Destino; no es por casualidad que no soy uno de ellos. Mi corazón me convierte en creyente ferviente con cada latido. De no ser así, no creería en ti y en mí.

38 comentarios:

  1. Cierto que la voluntad juega un papel importantísimo en nuestra vida, como también que los hechos son los realmente importantes y los que producen cambios en nuestra vida.

    Pero no es suficiente… nos condiciona la sociedad, la familia… quizá esté en ello el llamado destino, no elegimos nacer, no elegimos donde.

    Sí… puede que en el amor si tenga que ver el destino, porque es algo imprevisible, que no dominamos.

    Me parece precioso tu escrito, creo que debes escribir siempre a vuelablog , es una maravilla.

    Muchos besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Carmen:
      Soy ateo. No creo en dioses ni en demonios. Creo en que el Bien y el Mal no son soplos ni máculas en el alma, sino la plasmación de voluntades humanas sublimes o ponzoñosas. Abreviando: no soy un fatalista que se entrega al capricho de un azar que proveerá de risas y lágrimas su vivir.
      Sin embrago, creo en el Destino. Creo en nuestro vivir en un continuo vital, convertidos en marineros por los mares del Destino. En ese navegar, el desembarco en el puerto del amor es siempre día de fiesta, de besos y de excesos.
      Es toda una suerte que el destino nos haya permitido encontrarnos, Carmen.

      Eliminar
    2. Gracias siempre a ti, Carmen.
      Buena tarde.

      Eliminar
  2. Me ha gustado como has ido discerniendo entre unas cosas y otras en las que tienen que ver con el destino o con nuestra propia voluntad, pero al final yo creo que el destino es quien lleva la voz cantante, ¿por qué hemos nacido aquí y ahora?, el hecho más importante de nuestra vida y no tenemos nada que ver en él.
    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Me ha gustado como has ido discerniendo entre unas cosas y otras en las que tienen que ver con el destino o con nuestra propia voluntad, pero al final yo creo que el destino es quien lleva la voz cantante, ¿por qué hemos nacido aquí y ahora?, el hecho más importante de nuestra vida y no tenemos nada que ver en él.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Tracy:
      Conozco a personas con muy mala suerte, alguna de ellas podría decirse que son presa de un “destino aciago”. Quejarme por la condescendencia voluble con la que me trata la vida sería injusto y quejica. Mi “destino”, entendido como vida vivida, ha sido hasta el momento placentero, la verdad. ¿Mi futuro? si entiendo lo que está por llegar como lo que me merezco espera, lo aceptaré como mi Destino; de no ser así me rebelaré ante tamaño desatino. A estas alturas ya soy demasiado viejo para morir joven; y demasiado caprichoso como para aceptar que otros decidan por mí.
      Yo creo que nací en esta época para conocer a mi madre, eran tantas mis ganas de verla que nací con semanas de adelanto.
      Un abrazo, Tracy.

      Eliminar
  4. Hoy os habéis propuesto todos dejarme sin capacidad de palabra, por Dios, que estoy convaleciente aún... ay... Sabes algo Nino? Me gusta cuando se escribe un relato ni una reflexión, sino que se deja salir lo que los dedos dictan sin más, sin orden ni normas, palabra tras palabras... pues luego el resultado es algo tan maravilloso como lo que acabo de leer... Me hacen pensar en muchas cosas, y es que si bien es cierto se nos dio el llamado libre albedrío, pero no se nos pregunta cuando o donde debemos nacer, hay cosas que se nos imponen porque sí y hay no hay vuelta de hoja, son como son y punto... Luego está nuestro poder de decisión y de elección y ahí nos dejamos llevar por el instinto, la locura, las circunstancias, depende la persona... yo soy muy de ir de cabeza sin pensar, eso tiene sus riesgos... creo que me he dispersado en mi comentario... lo dejo así y me callo ya... jajaja...
    Un besín grande...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, H...
      Ante todo espero que te mejores pronto.
      Gracias por tus amables palabras sobre esta “enninación”. Me gusta mucho la escritura rápida (no automática, pues la corrijo), me ayuda a saber mis cómos y cuándos. Me alegra comprobar que no es tan críptica como me temía-
      “El libre albedrío” es un concepto inservible; ten en cuenta que el mismo Dios que teóricamente nos lo otorgó, nos expulsó de su Paraíso por el mero hecho de usarlo. El espejismo de libertad nos ayuda en la travesía por el que creemos mar de sargazos y acabamos descubriendo que es un océano de arena.
      Al igual que tú, soy de carácter impulsivo. Y no me ha ido mal. De no ser como soy, mi vida sería diferente, con un presente más estable y con mejor futuro. Pero probablemente también muy aburrida.
      Tu comentario no es en absoluto disperso, sino sincero y exultante en ganas de vivir en libertad.

      Eliminar
  5. Interesantes conceptos, tanto en el texto como en tus respuestas a los comentarios. Soy de la idea de que un monoteista se parece bastante a un ateo, en el sentido que cree en la existencia de un sólo dios y en la inexistencia de otros dioses. La diferencia es que un monoteista puede llegar a ser más intolerante, en el sentido de que puede a tener la convicción de que lo creen en dioses están equivocados.

    Existen las casualidades y existen quienes saben aprovecharlas, quienes se han preparado para notar que algo no es como se suponía que es. Algo que no notaran quienes usan el sentido común. Y lo de encontrarse con una mujer interesante, vecina o no, sabiendolo aprovechar no es sólo obra de la casualidad, sino hay algo de mérito.

    Tengo entendido de que existe el libre albedrío, aunque tenga que interactuar con libre albedrio de los demás y las circunstancias.
    Y en las grietas está la mecanica cuantica que acecha.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Demiurgo:
      Gracias por tu lectura atenta. Sí, muchas veces un teórico creyente en una fé demuestra ser impermeable a los valores humanos que ésta propugna y quedarse sólo con los ceremoniales (quizá por el componente de integración social que los acompaña) Hay demasiados “integristas” dentro y fuera de las religiones. De hecho, en un campo tan libre como el de las aficiones, son legión los que te critican si no compartes sus gustos. Por no hablar del fútbol, donde la figura del hincha vandálico es tan común,
      Quizá exista el “libre albedrío”, eso está a elección de cada uno.
      Muchas gracias por tu comentario detenido, Demiurgo.

      Eliminar
  6. Me ha encantado su texto desde que vi la fotografía. Sr. Ortea

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, ángela:
      Sí, la ilustración es tan sencilla como expresiva.
      Gracias por el comentario.

      Eliminar
  7. Mr. Ortea, aunque vengo del médico, me duele la cabeza y una endodoncia que me acaban de hacer, tengo que decirle que su vuelablog ha conseguido que me olvide por unos minutos de todo eso, así que gracias!! solo con eso ha hecho usted un gran favor a la humanidad y a mí principalmente, ya en serio coincido prácticamente con todos y cada uno de sus desvaríos volátiles, me rebelo ante lo posible y lo imposible y agradezco al destino, al hado o al hada que un buen día me trajo hasta aquí.
    Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Srta. Oteo:
      Espero que ya se encuentre recuperada de sus miasmas. Gracias por hacer un hueco para la lectura de éste su blog en una tarde en la que, de encontrarse en su situación, el que subscribe tendría el ánimo cerrado por derribo.
      Mis citas anuales con el dentista me hacen sentir cual teclado a merced de un mal pianista.
      El favor me lo hace usted con cada una de sus palabras de aprecio, de esas que no tienen precio y sí mucho cariño. Gracias.
      Un placer contar en mis desvaríos con su invariable compañía invariable.
      Sí, tan sólo han pasado cinco jueves de nuestro feliz encuentro y parece que llevamos toda una vida compartiendo complicidades.
      Un fuerte abrazo, , Srta. Oteo.

      Eliminar
    2. Sigo un poco miasmosa, la edad que no perdona y la endodoncia me duele horrores pero bueno dicen que bicho malo nunca muere, el destino se encargará de demostrar que era mentira y su nieta y los míos darán fe :)
      Cinco jueves solo y casi hemos agotado el repertorio de sabina??
      Buen fin de semana Mr.. Ortea, un beso.

      Eliminar
    3. Buenos días, Srta. Oteo:
      Confío en que esta mañana sí que se haya usted levantado desdolorida bucal. Sé bien lo que son los problemas de la boca; y no sólo debido a mi condición lenguaraz. Me temo que si mi nieto no nacido hereda mi salud bucal, el día en que nos conozcamos me negara todo saludo con vocal (gruñirá y gruñirá)

      En su imprescindible blog http://puntosuspensivos-teriri.blogspot.com.es/ he leído que usted cordinará nuestro próximo jueves cómplice. Será todo un privilegio contar con su inspiración.
      Un cálido abrazo, Srta. Oteo,

      Eliminar
    4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

      Eliminar
    5. Buenos días Mr. Ortea,
      Mi boca regular, para qué le voy a engañar, creo que hacerme dos endodoncias juntas una semana después de sacarme la muela del juicio fue sobrevalorar mi resistencia, pero sí el jueves que viene, si el destino no lo impide, le espero en mi casa.
      Un beso y disfrute usted del sábado.

      Eliminar
    6. Buenos días, Srta. Oteo:
      Diga que sí; no tiene sentido engañar a quien es creyente ferviente en su palabra.
      Los actos de valor tienen un precio; y eso de atreverse a confiar la boca de nuestros secretos a quien nos recibe embozado y armado, cual asaltacaminos, tiene mucho de confiar en la bondad humana de alguien docto en causar dolor.
      Pero, estos actos de valor son también delatores de nuestra capacidad de inocencia. Lo que, vivido lo vivido y sufrido lo sufrido, siempre es señal de nuestra capacidad para mantener el ánimo feliz.
      Buen domingo, Srta. Oteo.

      Eliminar
  8. Bueno después de leerte me ha quedado bien claro que soy de las que se manejan por instinto, dejando de lado las consecuencias, siempre que se trate de mí. Cuando mis actos pueden influir en otros, lo pienso un poco más. Creo que algunas cosas están en mi vida porque así tienen que ser, y por mucho que quise cambiarlas no se han modificado, sobre todo en lo que respecta a sentimientos. Y esto es un poco lo que digo en el poema que presenté este jueves.
    Después de mucho golpearme la cabeza, he comprendido que el único momento que tengo es este, lo demás puede estar o no, cambiar mi vida en un segundo, desmoronarse mis teorías y mis creencias en un solo acto de otra persona, como ya me ha pasado. Así que dejo que fluya el destino, tratando de hacer todo lo que me gusta y me da felicidad.
    Me ha encantado leerte, que me hagas exprimir las neuronas y pasar este rato de la mano de tus certeras palabras.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Sindel:
      Es siempre un estímulo y una suerte contar con tu compañía. Me gusta leerte. Me produce la sensación de disfrutar con algo nuevo. Sobre todo por la manera tan cuidada en que narras y describes, siempre con palabras claras.
      Encuentro difícil el aceptarme, de hecho mi estado más corriente (pero nunca vulgar) es el de guerra intestina. Soy inconformista y rebelde. Acepto mal las imposiciones, incluso las autoimpuestas, por lo que atenerme a una rutina es un conflicto diario.
      Me gusta creer que esquivo mi Destino y que mi soledad es una prueba de mi desafío al determinismo; sin embargo, hay una serie de constantes en mi vida me hacen sentir tranquilo y en paz: y eso siempre ocurre cuando no me siento solo.
      Gracias, Sindel.

      Eliminar
    2. Gracias a vos! Leerte realmente es tan interesante que siempre vuelvo buscando tu respuesta a mi comentario.
      Está muy bien ese desapego a la rutina, cosa que todo lo mata, me encantaría poder desestructurar la mía, sobre todo en cuanto a lo laboral, pero por ahora solamente soy una oveja más manejada por el lobo empleador. En los demás ámbitos de mi vida, si bien tengo ciertas costumbres, intento moverme con más libertad.
      Tal vez uno crea que esquiva su destino, pero justamente eso sea algo predestinado. Loco no? Bueno a veces suelo ser algo retorcida. De todas maneras lo único importante es que sea como sea que te muevas en este tiempo/espacio, esa conducta o rebeldía, te haga sentir lo más feliz posible.
      Un abrazo enorme.

      Eliminar
    3. Buenos días, Sindel:
      Para mí es toda una suerte contar con tu compañía y no te voy a negar que me anima el saber que encuentras interesante este blog. Gracias sinceras.
      Me gustaría tener mejor conexión a Internet para poder dedicar más tiempo a interactuar en otros blogs. Por ejemplo me gustaría participar en tus propuestas semanales, pero de momento no me es posible.

      Muchas veces presento como logros lo que son meros caprichos del Destino. Llevo una vida casi carente de obligaciones y responsabilidades, pero eso también la convierte en parte en una vida vacía. De hecho, mi obstinación en escribir tiene mucho de intento por llenar ese hueco.
      Una de mis grandes batallas es contra la apatía, ya que casi todo me aburre. Necesito crearme una rutina mínima: madrugar, forzarme a quedar con personas para no estar siempre sólo, recordarme que debo arreglar mi casa y cuidar mi aspecto… Mi personalidad es mi mayor problema, ya que siempre tengo la mente llena de ensoñaciones y no presto atención a mi entorno. Mi despiste es tanto físico como emocional, lo que me lleva a costantes problemas.

      Sin hacer de ello una rutina, sí que me viene bien hacer una buena costumbre de participar en las convocatorias jueveras. Es más, diría que es algo sanador, ya que me lleva a leeros, compartir y aprender. A conocer a personas como tú que encuentran un momento para dedicarme un comentario tan reconfortante para el ánimo.
      Gracias, Sindel.

      Eliminar
    4. No me agradezcas, mis comentarios son sinceros y por mi propia voluntad vengo aquí a leerte. Entiendo que debe ser complicado encontrar cosas que te saquen del aburrimiento crónico, mal de muchos hoy en día. Pero me alegra mucho saber que escribir te llena, y que hacerlo para los jueves es algo placentero para vos. Todo lo demás sobre tu personalidad me recuerda mucho a la de mi hijo, casi te diría que son gemelos. Pero también reconozco que tiene una inteligencia bastante mayor a los demás, y espero que sepa utilizarla en pos de su bien.
      No te preocupes por mi propuesta, cuando gustes, o puedas allí te espero, será un placer contar con tu presencia.
      Te mando un abrazo y feliz sábado!

      Eliminar
    5. Buenos días, Sindel:
      Vivimos en tiempos tan mezquinos, tan infectados por comportamientos miserables, que esta abundancia de actitudes sombrías hace que gestos humanos sencillos sean agradecidos por quien los recibe. En ti es algo sincero y voluntario el comentarme, Sindel; en mí lo es el sentirme apreciado por tu compañía: gracias.

      Mi aburrimiento, caprichoso como todo lo mío, es curioso: se activa habitualmente en compañía y casi nunca en soledad. Lo que me lleva muchas veces a forzarme a tolerar compañías como quien se inocula veneno, por eso de ver si a base de pequeñas dosis me vuelvo inmune al veneno del aburrimiento social. Pero mi ánimo rebelde y mi corazón delator, me llevan a optar por la sinceridad de aceptar lo que siento en lugar de buscar que me acepten otros.

      Te agradezco el que veas esa similitud entre tu hijo y yo. Confío en que él sea menos vehemente y más paciente que yo.

      Buen domingo, Sindel.

      Eliminar
  9. Me ha gustado la forma en el que has dejado que las palabras vayan surgiendo libremente, entrelazándose sin presiones en un texto en donde la fuerza del destino juega con el libre albedrío propio del que se presta a seguirle el juego.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas tardes, Mónica:
      Quizá la escritura sea una manera de comunicarnos con nuestro Destino. Son muchas las veces en que empezamos a escribir con una intención y acabamos haciéndolo sobre una devoción: como si ciertos sentimientos quisieran convertirse en palabras para así convertirse en recuerdos.
      Muchas veces entendemos la escritura en un blog como un mandar un mensaje en una botella para el que ignoramos el destinatario, sin darnos cuenta de que ese lector es esa parte común que hay en todos. Escribimos sobre nuestras sensaciones, para descubrir que son comunes a desconocidos que, a su vez, reescriben nuestras palabras al leerles y hacerlas suyas. Nuestro Destino es común: hacernos compañía, no vivir tan solos.
      Un abrazo, Mónica.

      Eliminar
  10. Hola, presidente!! Escribes muy bien :-)
    Te veo mañana en la asamblea?
    Saludos.
    Clara

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. buenas tardes, Clara:
      Disculpa mi tardanza en contestar a tu gusap.
      ¡Sorpresón(de los agardables9 el encontarme con tu visita!
      Nos vemos.

      Eliminar
  11. Hay demasiadas variables extrañas en la vida que no podemos controlar, pero en otras quizá si podamos influir.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días, Pikxi:
      Tienes toda la razón en tu reflexión. Y quizá es nuestro ser conscientes de lo incontrolable del Destino, lo que nos lleva a temerlo como un final y a disfrazar de virtud un acto tan cercano a la cobardía como es la prudencia.
      Feliz fin de semana, Pikxi.

      Eliminar
  12. Me encanta leer textos así..... De estos que tú llamas " escrito a vuelablog" y yo llamo... Sentir.

    Un abraz✴
    ..... De luz

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días, AtHeNeA:
      Aunque puede sonar a juego de palabras, y me reconozco juguetón perenne, me encanta que me lees y me ayuda el que me comentes. Tengo en gran aprecio tu valía creativa y valoro tu opinión lectora sin matices.

      Es siempre un estímulo el saber que lo que uno comparte son palabras que al leerse se convierten en sentimientos.

      Un abrazo, AtHeNeA.

      Eliminar
  13. Cuando una pasa por ésta tu casa, Nino, y lee reflexiones como la de hoy, con frases sublimes que nos hacen pensar un rato, dos ratos, tres ratos... el destino juega al escondite hasta que se hace de noche. Casualidad o causalidad... que bueno que apareciste por los jueves.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días, Rosa:
      Tus comentarios son de esos que se leen una, dos, tres veces… son lecturas, que no relecturas, pues cada vez que los leo me enfrento a un sentimiento nuevo: la primera alegría por su recepción, la segunda agradecimiento por tus palabras, la tercera reflexión por tus opiniones… si era mi Destino conocernos en “los jueves”, ¡qué pena el tiempo que estuve revoloteando al azar de días sin huella!
      Buen domingo, Rosa

      Eliminar
  14. Hola Nino: Tu escrito a vuelapluma es para leerlo detenidamente. Creo firmemente en la voluntad, el tesón y el esfuerzo como herramientas de crecimiento y eso, que pudiera parecer que se contrapone con los designios del Destino, no niega a este aunque sí lo complementa. El Destino quiso que un buen día, en una calle cordobesa, me tropezara con los ojos de mirada más limpia que haya visto en mi vida. Esos ojos siguen mirando limpiamente y lo hacen a mi lado permitiéndonos caminar juntos. Bendito destino.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días, Pepe:
      Gracias por tu lectura detenida y tu comentario sentido.
      Sí creo que la Voluntad tiene mucho de fe en nuestra valía y como tal es una herramienta imprescindible para alcanzar ese destino que el azar nos pone al alcance.
      Muchas veces la casualidad nos hace entrever una oportunidad, pero es nuestra determinación la que convierte lo casual en constante, como lo es ese amor que empieza con una mirada fugar y se consolida en un paseo vital de dos corazones acompasados.
      Me alegra saber que vuestra mirada se mantiene limpia e ilusionada, Pepe.
      Un abrazo.

      Eliminar

Gracias por tu lectura comentada.

Entradas populares