Nuevo cierre de convocatoria
juevera y nuevo regalo: nuestra musa y anfitriona Mónica, autora del blog Neogeminis,
nos ha dedicado esta imagen a cada uno de los participantes.
Participar en cada una de
las convocatorias creativas de los jueves supone adentrarse en un nuevo mundo
habitado por relatos ficticios, textos intimistas, poemas sentidos... Quizá tú
que me leer estás pensando en unirte a nosotros; si es así te animo a que lo
hagas. Te voy a contar mi experiencia:
Con permiso de Blogger tengo
un blog; y por caprichos del destino disfruto una vida. Soy quien soy gracias a
mi obrar a mi capricho y sin pedir permiso; de ahí que lleve tan mal esto de
tener mi cibervida pendiente de un hilo que puede cortar el antojo ajeno. A esta
inseguridad se une la precariedad de mi acceso a Internet (suelo acceder
tomando prestada una señal wifi ajena), lo que dificulta mi lectura de otros
blogs o el dejar comentarios. El tercer ingrediente de mi desencanto blogeístico
está en mi incapacidad para progresar creativamente.
Toda esta confluencia de
hechos y circunstancias lleva que a veces me aburra del blog y esté alejado de
él una temporada. Mi decidirme a probar la experiencia de los jueves fue
resultado de ese aburrimiento; mi permanencia en el grupo es resultado del
estímulo y del afecto que recibo cada jueves.
De hecho, si te fijas, verás
que últimamente apenas publico nada que no tenga que ver con el jueves y con
mis compañeros.
Estoy en un buen momento
anímico, en el que me apetece disfrutar de la luz de los días largos y de la
intensidad de las noches cortas. Habitualmente me gusta mi vida, pero ya sólo
ocasionalmente la disfruto con intensidad. Hace semanas que estoy en uno de
esos periodos en los que vivo intensamente para luego contarlo plácidamente. Hasta
ahora siempre cerraba “Ven y enloquece” cuando me invadía esta sensación de
plenitud; ahora aún no lo he hecho. Y eso se debe a lo mucho que disfruto,
aprendo y recibo con cada convocatoria juevera, en la que me convierto en
explorador de nuevos mundos y me descubro en todos ellos.
Espero leerte pronto entre
nosotros.
Un abrazo.
Brindo por ese buen momento en el que se encuentra, Sr Ortea!
ResponderEliminarMuchas gracias, Ángela. Un fuerte abrazo.
EliminarY ni se te ocurra cerrarlo!!!
ResponderEliminarA ver si voy a tener que ir a buscarte y devolverte a la blogosfera!!
Un beso, feliz semana!!
Buenas tardes, Teresa:
EliminarGracias por tus ánimos animosos. No me planteo cerrarlo, pero sí que me voy a tomar un par de semanas de vacaciones, durante las cuales estaré casi comprimentemente alejado de Internet. Tengo ganas de volver a pintar mi casa (de verde, blanco, amarillo y azul) y eso me llevará un tiempo.
Puedes venir a buscarme cuando quieras, ya nos encargaremos nosotros de perdernos.
Espero que la semana esté pasando de manera ágil, Teresa.
Un abrazo.
Pues disfrute usted de sus vacaciones y de su casa colorida, del proceso de pintura también :)
EliminarLa semana complicadilla como esperaba, mañana toca día de médicos y hospitales pero nada grave.
Y sí, cualquier día nos perdemos y no nos encuentra ni google.
Un beso y hasta pronto!
Buenas tardes, Teresa:
EliminarEspero que el día de hoy haya sido llevadero pese a su pesadez.
Mientras te escribo apuro un helado (el día menos pensado me presento a un concurso de zampa cosas ricas). Reconozco que hoy he incumplido mis planes: tenía pensado dedicar la mañana a rascar las paredes del salón y me he ido a la playa, por la tarde curro así que lo dejaría para mañana de no haber quedado. El viernes, que además dan mal tiempo, me podré a hacer el pepegotera.
Una idea para un próximo proyecto es la de una feliz utopía de un mundo sin Internet ni telefonía móvil, el problema está en que quiero ambientar el relato en la temática ciber-punk, con lo que no sé muy bien aún cómo planteármelo-
Un cálido abrazo, Teresa.
Me alegra mucho que tu estado anímico sea bueno, y también que escribas relatos los jueves, pues es un regalo leerte.
ResponderEliminarYo también estoy agradecida a Neogéminis.
Muchos besos a los dos.
Buenas tardes, Carmen:
EliminarMientras te escribo me siento tan relajado que temo quedarme dormido luego en mi jornada laboral.
Sé de la sinceridad de tu alegría y te la agradezco. Por un par de semanas no voy a escribir nada en el blog, quiero aprovechar el buen tiempo para sanear mi casa y pasármelo lo mejor posible. Imagino que retomaré la escritura compartida el jueves 9 de julio.
El regalo es contar con la lectura atenta de alguien con tu capacidad creativa y tu generosidad, Carmen.
Nos leemos en dos semanas-.
Un fuerte abrazo.
Muchas gracias :) Espero que te lo pases muy bien, diviértete mucho y descansa.
EliminarMontón de besos
Buenas tardes, Carmen:
EliminarDisculpa mi retraso en contestar.
Imagino que te puede sorprender lo que te voy a contar: esta mañana he estado muy tranquilo limpiando la fosa séptica de mi casa y colocando una nueva cortina en la bañera. Me gusta comprobar que, con limitaciones, soy capaz de hacer arreglos caseros.
Feliz domingo, Carmen.
No me sorprende... Son cosas a las que hay que dedicarles tiempo... :)
EliminarFeliz domingo.
Hola, Carmen:
EliminarSí, tienes toda la razón: debemos dedicar todo el tiempo que podamos a cuidarnos. Por suerte, yo puedo hacerlo; hay muchas personas a las que su vida no se lo permite.
¡Feliz miércoles!
Si tú estás bien, todo está bien... Me alegra tu buen ánimo y que te haga feliz escribir estos relatos exclusivos de los jueves. También comparto tu idea de disfrutar de tantas otras cosas fuera de las redes, es bueno abrir ventanas y airear la casa y, si es posible, airearse uno... A mi me gustan los puentes, este verano me he propuesto cruzar todos los que pueda, a ver hasta donde llegan mis pies. (De vez en cuando, pararé para leerte un rato).
ResponderEliminarUn abrazo, Nino. Que vaya muy bien.
Buenas tardes, Clarisa.
EliminarSon muchas las veces en que me obceco en no ser feliz, en empeñarme en hacer de la felicidad algo complicado, cuando mi vida es sencilla. Siempre he buscado una vida liviana en obligaciones y responsabilidades (propósito no fácil, ya que conlleva un día a día apurado en lo económico y solitario en lo afectivo); pero hay etapas en las que me dejo llevar por el mimetismo e intento tener lo que a la mayoría le resulta común pero a mí me es esquivo.
Ayer por la tarde he estado mirando viejas fotos familiares, ya que planeo hacer una digitalización de la mayoría de ellas. Me llamó la atención ver que en muchas instantáneas, sacadas sin que yo fuera consciente de ser observado, aparezco sonriendo mientras estoy solo y hago actos cotidianos como comer, leer o estar absorto en mis ilusiones.
Un cálido abrazo, Clarisa.
Feliz domingo.
No nos va a regalar un relato este jueves, Sr Ortea?
ResponderEliminarBuenas tardes, Ángela. Tardaré unos 10 días en volver a bloguear. Le recomiendo que visite los blogs de mis compañeros. Cuídese.
Eliminarlo que para algunos sería un dolor de cabeza para vos
ResponderEliminares una maravilla
Ya ves la vida
es del color en que se la mira y la siente
Brindo por los grupos del jueves!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Buenas tardes, Mucha:
EliminarMe llama la atención la comprensión que muestras hacia mis actos. Tus comentarios me hacen leerme en otra vida, diferente en vivencias pero similar en anhelos. Gracias.
La condición humana es rica en diversidades, pocas actitudes me entristecen más que la de desvirtuarse de lo innato para intentar ser aceptado. De pequeño llevaba muyy mal la intransigencia que me rodeaba: lloraba por los desprecios y los malos tratos que sufría. Mi madre me ayudó a entenderme y quererme, sin por ello justificarme en mis errores voluntarios ni disculparme cuando mi conducta era muestra de falta de consideración a los demás.
Con el tiempo he ido encontrando a otros iguales en desemejanzas, algunos poseen unas habilidades sociales que les han permitido integrarse en la sociedad sin atenuar su identidad; la mayoría sobrevivimos como podemos. El paso del tiempo nos va volviendo muy quebradizos. Cada vez me protejo más en mi soledad, de ahí que agradezca tanto vuestra compañía lectora y la de mis camaradas jueveros.
Tarde gris de domingo, confío en que el Sol te salude en Miami.
Brindo por la suerte de habernos encontrado, Mucha.
te pregunto ¿por qué los jueves y no los lunes?
ResponderEliminarjajajamas besos
Muchas veces tengo la sensación de estar en el medio, sin buscar integrarme en ningún grupo o sin lograr ser aceptado pero tampoco rechazado abiertamente. Son muchos los aspectos en los que aguardo o me mantienen a la espera. Es de ese “estar en el medio! que me identifico con los jueves, Mucha.
EliminarFelicitaciones por tu buen estado de animo y que se extienda siempre.
ResponderEliminarBuenas tardes. Boris:
EliminarGracias por tus buenos deseos.
No concibo la felicidad como un viaje por un mar en calma, sino como una travesía donde una veces el viento hincha las velas de tus ilusiones y otras veces amanezca con desarbolarte. Es más, los contados naufragios vitales que he sufrido me han llevado a costas extrañas donde encontré algo mío que desconocía. Por suerte, la vida me ha tratado bien, por lo que navegar por sus aguas no me ha resultado tortuoso.
Un abrazo, Boris.
hola
Eliminartu comentario me ha dejado maravillada
Buenos días, Mucha:
EliminarDisculpa mi retraso en contestarte.
Lo que me maravilla es la generosidad de tus palabras y el estímulo de tu compañía.
Un abrazo lleno de luz y brisa marina.
sos tan transparente cuando escribis que casi se te ve.....
ResponderEliminarse te siente.
Crecer si cada dia mas
siendo lo mejor que podamos ser con nosotros mismos
¡Muchas gracias, Mucha!
EliminarImagino que esta “trasparencia” que mencionas es común en quienes al escribir no buscamos crear un personaje, sino acercarnos a nuestra persona. Me gusta escribir y, quizá me gusta más, leerme. Me ayuda a conocerme, pensarme y sentirme.
Luego está el confort que conlleva el sentirse apreciado por personas que, como tú, trasmitís cariño y aprecio. Esta sensación es algo único.
Te deseo lo mejor, Mucha.
¿Y el doctor?
ResponderEliminar¿donde esta metido???...se lo extraña
Hola, Mucha:
EliminarEl doctor Korda se encuentra ausente en un viaje por las nieblas de mi recuerdo. A su piel delicada la irrita la caricia del sol y a sus gustos exquisitos les ofenden la vulgaridad de formas y modales que acompañan la llegada de un verano lleno de sudores, hedores y cuerpos que exhiben lo que debería permanecer oculto.
Al igual que volverá el otoño, él también lo hará.
En su última carta te menciona y te manda los mejores de sus deseos.
Un abrazo.
Así que relatos los jueves. Pues habrá que esperar a que pasen esas semanas sabáticas y el piso quede multicolor.
ResponderEliminarAnoto regresar para ver de qué va esto que a priori, me gusta.
Saludos y buenas gafas para pintar el techo!
Buenos días, Ning Jie:
EliminarGracias por tu comentario. Disculpa mi retraso en contestarte, no veas en ello una muestra de desinterés sino una prueba de que en estas semanas mi vida está muy alejada de Internet.
Llegarán más jueves; y lo harán con el mismo estímulo y fuerza con que ahora la brisa de la mañana me llama a salir a callejear y alejarme del teclado. ¡y más ahora que he dado por acaba la época de reformas hogareñas y he inaugurado la de chapuzones y revolcones! Las gafas de cerca han caído en el desuso, ahora uso las que me permiten ver el sol a lo lejos.
Un abrazo, Ning Jie.
dale hacé un poema caliente y enamorado
ResponderEliminarde lo que te salga de adentro volando....
Mi querida Mucha:
EliminarEn estos días más que dar, recibo palabras y silencios, gestos y caricias. Intentar hacer de ellas un poema, me resulta tan inalcanzable como el intentar resumir un “adiós” en un “hasta luego”. Primero sentir, luego escribir.
Feliz sábado.
Llevas mucho tiempo de silencio. Estás bien?
ResponderEliminarBuenos días, Ángela:
EliminarSí, estoy bien. Gracias.
Me encuentro en una de mis etapas cíclicas de alejamiento de Internet. Con mi silencio informático no buscaba preocupar a nadie.
Un abrazo.
estas perdido
ResponderEliminarestas bien poeta ?
Quizá llevo perdido todo mi tiempo y lo que llamo vida es un mero viaje para encontrarme, Mucha.
EliminarViaje que resulta en ocasiones tan estimulante que se me olvida que me alejo sin despedirme de quienes me importan.
estas perdido
ResponderEliminarestas bien poeta ?
Siempre acabo volviendo, es cuestión de tiempo el redescubrirme disfrutando con nuevos ánimos de mis estímulos habituales.
EliminarNo creo estar anclado a nada ni a nadie; pero sí que soy fiel a lo que me quiero y a quien me quiere.
Por eso siempre acabo volviendo. Imagino que ese siempre volverá en septiembre.