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Mis mejores deseos para ti y los tuyos, amable leyente, ahora y siempre

martes, 12 de marzo de 2019

Sombras


Aviso a blogueantes: se avecinan cambios.

Me encuentro en una intersección creativa. No sé bien qué camino tomar, pero no será el habitual. Tengo dos novelas empezadas, varios relatos por culminar y bastantes textos a medio escribir para este blog –esto último es habitual, ya que muchas veces no sé convertir los destellos de inspiración en figuras creativas, y los relego a sombras–.
Para salir del bloqueo al que me reduce el encontrarme en esta encrucijada me planteo tomar un camino diferente, que empieza por asumir un heterónimo que no sea el de Nino Ortea –mi intención no es condenarlo a la sombra, pero sí que quiero sacar a la luz otras personalidades literarias–.


No me apetece escribir siempre de la misma manera. No quiero ser uno de esos autores de innumerables libros pero de una única obra. Y es un hecho que amanero lo que firmo con mi, hasta el momento, único seudónimo. El que esté escribiendo esta introspección sobre un tema reiterativo en el blog –“Nino ante Nino Ortea”– es prueba de ello.
Creo que el problema en el desarrollo de mi personalidad literaria está en las restricciones a las que la somete mi persona. Si quiero avanzar como escritor, necesito liberarme de las sombras que mi ser proyecta sobre mi personaje creativo. Pero no sé cómo hacerlo. No puedo recurrir a estimulantes químicos para liberarlo. He intentado escribir en lugares distintos, redactar a horas prefijadas o hacerlo en horas brujas. Pero mi heterónimo sigue escribiendo con alguno de los registros previsibles. Y más en cuanto corrijo lo que escribe, ya que esta función la realiza mi parte consciente.
El que recurra a la escritura automática y a la publicación directa de esos automatismos tampoco es solución: cuando me posee la voz creativa mi discurso es tan intenso como impuro, diría que es de temperamento febril.

Confío en encontrar la manera de escribir pronto algo que me parezca una innovación en lo creativo. Si cuando hablo puedo modular mi voz, también puedo hacerlo cuando escribo.
Se acercan cambios, para mejor.
Gracias por tu compañía en este divagar, amable leyente.

Por cierto, la palabra “sombra” siempre me acaba evocando a Javier Solís.



25 comentarios:

  1. que difícil todo ésto que contás porque uno busca siempre "una voz", un estilo que lo identifique, algo propio, distinto y vos al lograrlo buscás otro horizonte... es difícil ves? ja... pero la búsqueda siempre es buena...

    otro ejemplo sería mi director favorito que siempre se dice que filmó la misma película en distintos tonos: Kubrick... y el ejemplo contrario serían Bowie o Prince que buscaron cosas distintas para no estancarse...

    solo es una reflexión escrita propuesta por la lectura de tu entrada... continuará ja.... saludos....

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    1. Hola, JLO:
      Casualmente el domingo volvía a ver una película de B Keaton –The 3 Ages– y me acordé de ti.
      Cuando se me pasa la desazón, comprendo que no llegaré a asentarme en el campo de la creatividad en Internet. En el del papel sí que lo he hecho: firmo con mi nombre bautismal los ensayos y con mi heterónimo las ficciones. Sin embargo, al ser tantas las posibilidades que ofrece Internet –incorporar fotos, videos, voz…– me desoriento en mitad de ellas. Me apetece colgar fotos, subir audios, publicar collages… y, obviamente, me quedo con las ganas dadas mis limitaciones creativas. En mi caso, la dificultad está en aceptar que mi “voz” no vale para todo tipo de melodía.
      En los casos de Prince o Bowie, sobre todo en el de Prince, hablamos de genios creativos a los que se intentó embotellar. A Bowie si se le dio más cancha para canalizar sus inquietudes artísticas, incluso se le permitió mantener su condición de vergel musical pese a su desierto creativo de más de 25 años. Pero a Prince, no.
      Creo que Kubrick es un autor incomparable en el arte cinematográfico. Impulsaba y controlaba sus proyectos, personalizándolos con sus constantes narrativas –da lo mismo que adaptase a Thackeray en “Barry Lyndon” que a King en “El resplandor”, él cuenta su historia–. No comparto a los reduccionistas que afirman que sus películas son variaciones tonales. Contó historias muy diferentes, abordó géneros diferentes e incluso influyó en la narrativa fílmica posterior de algunos de ellos.
      Gracias por tu compañía, JLO.
      Un abrazo.

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  2. Tal vez no se trate de librarte de esas sombras, sino de saber usarlas.
    No está mal que Nino Ortea tenga un estilo propio.
    Yo lo tengo en mi dibujo, tal vez deba aceptarlo, aunque prefería el estilo más limpio de otros.

    Saludos.

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    1. Hola, Demiurgo:
      Te agradezco tu consejo y pienso que es tal y como dices: debo aprender a usarlas sin renunciar a mi estilo propio.
      Tal y como le acabo de escribir a JLO, mi frustración creativa personal me lleva a proyectar la sombra de la culpa sobre mi personaje literario. Ayer, luego de haber escrito esta introspección, le di muchas vueltas al asunto y comprendí que, de nuevo, él paga mis culpas.
      Por lo que he visto de tu dibujo, tienes un entintado muy definido. No me da la sensación de sucio, pero esa esa mi percepción.
      Gracias por tu compañía, demiurgo.
      Un abrazo.

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  3. Me maravillas Yo sigo casi siempre lo mismo y si bien escribo menos que antes sigo escribiendo.Me maravillan tus luces y lo que haces.No te veo en FB mucho un besos grande

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    1. Maravillante Mucha:
      Hasta donde puedo opinar, tu estilo eres tú. Eres fiel a ti misma, de ahí que es lógico que no cambies tu personalidad literaria. Eres Mucha de la Torre allí donde estás, te ensueñas o se disfruta de tu compañía.
      Sí, disculpa mi descortesía en las redes sociales. Mi déficit de atención hace que me disperse en Internet y descuide mis modales. Veo FB o Twitter como un mero recurso de notificación para mi personaje, y no me doy cuenta de que allí me relaciono con personas.
      Un gran abrazo, Mucha.

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  4. Creo que tus crisis de identidad (disculpa si el término no es acertado) hablan de una mente inquieta e inconformista, Nino. Para nada creo que eres repetitivo y creo que tu seudónimo es variado. Pero si tú ves necesarios esos cambios es que los necesitas.
    Besos!!

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    1. Muy buenas, Ángela:
      Nada que disculpar y todo que agradecerte (además de definitoria, la expresión “crisis de identidad” me hace sentir todo un supertipo).
      Soy de carácter inconformista y de actitud inquieta (el TDAH manda). Creo que mi trastorno me define más en esta etapa de la vida tan cercana a la vejez, pues ya no hago por controlarlo salvo en situaciones muy concretas. O quizá es que, simplemente, a mi déficit de atención se une que no disimulo mi falta de interés.
      Me has ayudado, de nuevo, a reflexionar, Ángela.
      Gracias sinceras.

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  5. Nino:Fernando António Nogueira Pessoa, más conocido como Fernando Pessoa, acudía a los heterónimos, desde la postura de que el escritor no tiene una sino varias personalidades como escritor, que enriquecen su literario. Quizás,al usar tantos heterónimos -aventuro- que no quería repetirse en un imaginario y estilo único. Por ello su nombradía desde los ficticios de Alberto Caeiro, Álvaro de Campos, Bernardo Soares y Ricardo Reis.Bienvenido, pues, Nino Ortea, desde otra nominación, para enriquecimiento de tu escritura narrativa. Un abrazo. Carlos

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    1. Buenas tardes, Carlos:
      Los heterónimos son a Pessoa como la brisa al mar. Yo soy un charco que, cuando llueve, se ensueña como un océano. Y en mis ensueños de grandeza le intento poner nombre a costas que nunca llegaré a bañar.
      Un baño de realidad me lleva a darme cuenta de que mi agua apenas llena una cantimplora creativa.
      Un abrazo agradecido, Carlos.

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  6. Nino... seguro que das con la solución si no lo has hecho ya mientras escribo aquí. Estoy segura de que será un gran cambio donde podremos disfrutar de ti y de todo cuanto exprimas.

    Mil besitos con abrazo, compañero.

    PD.- Gracias por lucir el regalo :)

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    1. Buenas tardes, Auroratris:
      Gracias a ti, lucida compañera, por tu generosidad.
      Creí haber encontrado esa solución, pero por suerte me di cuenta a tiempo de que en realidad era una disolución que anulaba mi pasado.
      Estoy probando en mi blog personal, el que sólo se leerá por otros cuando yo haya muerto, ciertas voces. Las voy a dejar reposar por un tiempo antes de comprobar cómo funcionan y si puedo entonarlas en público.
      Hasta entonces, sólo publicaré lo que firme Nino Ortea.
      Gracias por tu compañía, Auroratris.

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  7. Pienso que aunque escribas con otros seudónimos, siempre tu sello lo llevará, es inevitable. Pero tu llevar tu sello es un lujo para cualquier cosa que escribas. Eres una persona muy creativa y tus libros siempre serán muy diferentes, porque tienes una mente muy abierta y porque (repito) eres super creativo.

    Un beso grande

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    1. Mi querida Carmen:
      Eres una persona bienhechora. Tus palabras y actos buscan hacer un hueco para todos, sin restringir o frenar a nadie. Me siento honrado de tenerte en mi vida.
      Gracias por tu compañía constante y tu aliento reconfortante. En estos momentos mi mente está muy abierta, demasiado. El palomar que tengo por cabeza me impide tomar pie en cualquiera de mis proyectos.
      Espero haber vuelto pronto a mi estado habitual de dispersión.
      Muchas gracias por todo tu afecto, Carmen.

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    2. Gracias por tus palabras tan bonitas para mi. Más honrada me siento yo de tener a una persona de tu calibre personal en la mía. Eres una bella persona y me siento muy orgullosa de tener la suerte de leerte.

      Un beso enorme.

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    3. Hola, Carmen:
      Mis palabras son, a la vez, un reflejo del afecto que me muestras y un acto de sinceridad con lo que siento hacia ti como persona, Carmen, y hacia tu personaje, Sakkarah.
      Un abrazo, compañera.

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    4. Gracias, eres un cielo... TE deseo mucha suerte, mucha.

      Un beso grande.

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    5. Estoy en el cielo cuando me siento acompañado por personas con tu excelencia, Carmen.

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    6. Tú sí que eres excelente. Un beso enorme.

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    7. Siempre me reconforta el leerte, compañera.
      Muy feliz tarde.

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  8. Yo no veo en tu imaginario literario ninguna sombra, más bien lo contrario. Sí entiendo que quieras cambiar de perspectiva y con ello tomes lejanía también desde el nombre aprendido, es muy lógico y enriquecedor, creo esa solución para visitar nuevos ambientes literarios con nuevo traje nominal. Me gusta. No obstante, tu enriquecido acervo literario se verá ampliado por nuevos horizontes, estoy segura que, lograrán que tus lectores disfruten de tus nuevas aventuras literarias.
    Ahí estaré, con el mismo interés e idéntica alegría, dispuesta a leerte, sea cual sea su nombre de escritor, estimado amigo.
    Toute la chance et la joie des jours pour vous, écrivain singulier.
    Que le soleil brille sur toi, mon ami!

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    1. Imaginativa Clarisa:
      Las sombras forman parte de mi, como lo forman de todos los que caminamos a la luz, sin escondernos. No me gustaría ser un hombre sin sombra, ya que entonces formaría parte de la oscuridad.
      Mi personalidad literaria tiene también sus sombras, lo cual me gusta. Lo que ocurre es que ahora yo estoy en un momento de bastante dispersión y él no logra canalizar su productividad. Estoy en babia desde hace meses. Con decirte que ahora mismo acabo de reparar en que una amiga me había escrito hace 15 días y hasta ahora no he reparado en ello. Ahora me pongo a corresponderle, confío en que disculpe mi despiste.

      Estoy metido en nuevas aventuras literarias, y me apetece meterme en más. Navegar por costas ignotas donde no me siento extraño es siempre el aliciente para seguir vadeando con curiosidad.
      Bueno, creo que mi digresión ha levantado el vuelo y me alejo del curso del comentario al convertirme en una aeronave.
      Créeme, Clarisa, leerte es una brisa de buen viento para mis velas.
      Veo que has publicado en tu blog.
      Le escribo a mi amiga y paso a contestarte.
      Un abrazo cálido, compañera.

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Gracias por tu lectura comentada.

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