Paula Abdul - Opposites Attract
Siete vidas tiene el gato… y éste las tiene para rato.
Y todas gracias al efecto del afecto que mi amiga Flor le tiene a Minino Gatea. Quien –tras haber andado a gatas por callejones y balcones– ha vuelto para asumir la imagen de mi perfil después de haber leído este texto “floril”.
Eso sí, el muy gatudo se ha puesto ceñudo cuando me ha recalcado que ya no será reportero para mis investigaciones en ficciones narrativas. Él ha decidido ser imagen imaginada de lo inimaginable que es lo ficticio cuando lo inspira la realidad del afecto.
Y es que Minino ha regresado por Flor y lo ha hecho para todos. Para maullar junto a quienes respetan a todo gato viviente. Para ronronear junto a quien no le pone cara de perro al afecto. Para dar un zarpazo a quien viene a buscarle tres pies al aprecio.
Por Flor, por mí, por todos… por el autorespeto que nos debemos frente a las agresiones de miserables: ¡Minino Gatea ha vuelto!
¡Remiaú!
La imagen de Minino Gatea proviene de Internet. No me ha sido posible identificarla por su título o por su autoría.