Simiesco Amedio:
Tengo que admitir que el de
Greta es un nombre que siempre me ha parecido carente de garbo, al contrario
que otros como “Ninoska” o “Matajari” que resuenan arrebatadoramente
galanes,
Pese a esta “desapetencia” por las Gretas y a mis “pieleas” con las grietas no puedo por
menos que constatar cierta admiración por la ingeniosa Greta Tintin (sin Milú) Eleonora Ernman Thunberg. Y es que, mi simio amigo, yo
siempre estoy quejándome del desastre de sufrir el lastre de un nombre tan
largo como el mío –que hace que mi patronímico no encaje en los cuestionarios y
desencaje a las cuestionadas–, y ya ves lo lejos que ha llegado esta incuestionable
sueca que a sus 16 años es toda una lideresa mundial que estuvo a punto y coma
de comerse el Premio Nobel de la Paz –gracias a su publicitada campaña para
mejorar el estado de nuestro citado planeta–.
Lo que de verdad admiro en
ella es cómo se hace la sueca ante la obligación de ir a clase: desde que se
inventó esta excusa salvacionista lleva casi dos años viajando por el mundo y
sin ir al instituto. Y pensar que yo comía tiza o vestía ropa mojada para
quedarme seco de ir a clase… Viendo las fotos del “antes” y del “ahora” de la
pizpireta Greta Thunberg, está claro la mejora planetaria que ha conseguido:
Antes era ella quien cargaba
sola con la pancarta.
Ahora son otras las que la
llevan por ella.
Pero bueno, compañero,
reconozco que –como buen español– llevo décadas soñando con chicas suecas. En
concreto desde que conocí a Pipilota –que nunca iba al colegio, tenía por
compañero a un mono y viajaba de los Mares del Sur a los Polos del Norte–.
¡Ah, quien fuera ficticio
como un sueco “bienpensante” y no
real como un español “malamante”!
Salud, camarada Amedio.
Las suecas tienen ese encanto de lo perfecto... si las conocemos no se ja. Saludos!!
ResponderEliminarHola, JLO:
EliminarAquí en España, durante la dictadura franquista, la mujer sueca era considerada la encarnación del deseo sexual. Con la llegada de la democracia y de las becas Erasmus vimos que la vulgaridad no entiende de nacionalidades.
Un abrazo, JLO.
Hola Nino , si las suecas son así imagínate como son los suecos , jajajajaj
ResponderEliminarEn cuanto a lo de esta niña , que quieres que te diga , te soy sincera o me lo guardo para mí... Pues que esta niña , es una marioneta parlanchina , y que yo no me creo que por muy inteligente que sea , esa capaz de hacer todo lo que se ve en tv , ya que hay alguien con mucho poder que es la que la dirige , y como dicen es una muy buena actriz , te deseo una feliz tarde de Domingo besos de flor.
Risueña Flor:
EliminarDesde mi ignorancia, nunca he conocido a ningún sueco, los hombres suecos siempre me han parecido aburridos (al igual que no comparto la fascinación por la mujer sueca). Creo que se debe a que el clima intempestivo que hace por esa zona de Europa me produce bostezos (el frío me da sueño). Lo más al norte que he estado es Dinamarca. Y fue llegar y sentir que estaba en una sociedad aséptica.
Respecto a Greta, comparto tu impresión de que hay toda una serie de intereses creados detrás de su salto a la fama. No le veo otra explicación al hecho de que una adolescente alcance tal repercusión por decir lo evidente.
¡Que tengas una semana de lo más ronroneante, Flor!
De suecas, ahora recuerdo a Marie Frediksson, de Roxette.
ResponderEliminarCreo que hay mucho a favor de Greta, le creo. Por lo menos, más que los criticados por ella. Lo de cambio climático es algo probado. Y está difundiendo lo que significa el asperger.
Buena entrada.
Hola, Demiurgo:
EliminarMarie Frediksson despierta todo mi respeto por la forma pública en que aborda su lucha contra el cáncer.
Respecto a Greta, no hay duda de que su denuncia de los efectos devastadores del “cambio climático” es compartida por cientos de millones de personas. Como persona que tiene un trastorno de conducta, me parece estupendo que alguien que comparte este rasgo cuente con tanta aprobación social.
Un abrazo, Demiurgo.
Hola, Nino. Primero te felicito por el nuevo libro que estás a punto de sacar. Seguro que será tan genial como todo lo que hasta ahora has escrito.
ResponderEliminarUna entrada muy interesante, estimado escritor. Yo creo que en estas causas "mundiales" hay mucho de todo. Hay mucha demagogia y mucho verdad, y también quizá mucha bondad, riesgo, por algunas partes. Y como en este tipo de cosas, mucho interés (interesado) y mucho desinterés (desinteresado); y mucha desinformación entre tan información. Y al final, la idea buena y la persona luchadora, queda sólo figurativa porque los grandes lobbies son los que mueven los hilos para que las masas muevan las aguas y ellos "pesquen". Ya sabes...
Conozco personas con Asperger (trastorno del espectro autista y Autismo (y que no son lo mismo), y diría que, Greta, no creo que sepa muy bien cuánto se mueve a su alrededor para bien o para mal. Yo creo que no excusas para no actuar contra el cambio climático, aunque se ve mucho ruido y pocas acciones. Los humanos no nos ponemos de acuerdo en nuestro pequeño entorno, familia... Imagino que un mundo acordando acciones generosas conjuntas es una utopía...
Me ha encantado el debate. La naturaleza bien merece estos encuentros aunque solo sean verbales escrituras.
Abrazos, Nino. Millones de soles para ti!
Hola, Clarisa:
EliminarEspero que estéis bien. Gracias por acercarte a conversar.
Este nuevo libro tiene mucho de viejo: es una revisión de “Donde habita el olvido”. Tengo 4 novelas empezadas, pero no sé cómo continuarlas. A la vez me apetecía publicar una obra que funcionase como punto y aparte en mi trayectoria de autoedición. Opté por volver a visitar San Agustín y sus personajes.
Por desgracia, todos sabemos de la manipulación de sentires que hay detrás de los pancartistas de “causas mundiales”. Todo dictador dice actuar en defensa de su pueblo, todo supremacista asegura defender la igualdad, todo adicto ve libertad en su adicción… El de Greta es un caso más de persona convertida en personaje de tragedias mundanas dictadas por los intereses creados. Y es que tal y como dice un personaje en la obra homónima de Jacinto Benavente: “Mejor que crear afectos es crear intereses”.
Compartor de manera plena tu reflexión, de ahí que mis acciones las aplique en mi entorno. Es más, sin saber qué era el “ecologismo” en casa me educaron para reducir, reciclar y reutilizar.
Es curioso cómo la ficción puede convertir en modismo una realidad sufrida. El que una de los personajes de la teleserie “Big Bang” sufra Asperger, ha hecho que el trastorno se visibilice y muchos personajillos se atribuyan sufrirlo. En mi caso sufro trastorno por déficit de atención, sin apenas hiperactividad. Y es algo que me dificulta en tareas cotidianas y que me beneficia en otras: me da una gran capacidad para abstraerme, lo que es todo un oasis en desiertos de monotonía.
Encantado con este debatir y con el oasis de nuestros encuentros.
Me haces sentir millonario en ilusiones soleadas.
Un planeta de abrazos, Clarisa.
Me has hecho sonreír La música la cara de la chica todo genial Andas perdido pero te presiento feliz
ResponderEliminartoda la suerte del mundo para vos
Hola, sonriente Mucha.
EliminarMe alegra tú alegría. Aciertas, me siento feliz.
Salud y suerte, Mucha.
Muy bueno... Ahora como todo cambia no sé si esta niña hará bien faltando al colegio. Yo pienso que es necesario.
ResponderEliminarNo es malo que crezca en ayudas, lo malo es que todo se llegue a desvirtuar como suelen hacer algunas cosas en manos ya de las masas y dependiendo de ellas...
Un beso enorme.
Hola, Adelina:
EliminarQuizá sea la edad de Greta lo que más me lleva a desconfiar de su figura pública: encuentro inapropiado permitir que alguien se someta a esa presión a los 14 años.
Un abrazo, Adelina.
Tienes toda la razón, no es una edad para someterse a esas presiones.
EliminarUn beso enorme.
Hola de nuevo, Adelina:
EliminarSí, su edad me resulta llamativa y hace que vea en su repercusión planetaria un trabajo de intereses creados.
Un abrazo planetario, Adelina.
Por asociación Greta me recuerda a grieta, seguro que es por deformación profesional, como arquitecto, ante las fisuras de los materiales o de la razón, siempre me entran ganas de repararlas.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Hola, Francesc, gracias por tu comentario:
EliminarEs curioso que la formación educativa nos lleve a temernos deformados en lo social, y más cuando esa formación es vocacional (en mi opinión, el proceso deformativo se produce en los colegios, en las etapas infantiles, pero la educación superior nos permite acercarnos a nuestras escancias).
Un abrazo, Francesc.
Ahora soy yo el carente de garbo.
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