Hola a todos:
Hace cuatro
días, anuncié en este blog la autoedición de la novela juvenil «Contra el
Robasueños». En ese texto
promocional afirmé que no marco beneficio sobre el precio de comercialización
que establece Amazon –empresa que imprime y distribuye mis autoediciones–.
A la sazón de
esta afirmación, la atenta Mag –autora del blog sugerente https://latrastiendadelpecado.blogspot.com/–
me preguntaba esto:
Desde entonces
el eco de su pregunta ha seguido resonando en mi ánimo y ahora intentaré darle
una respuesta mas detallada. Información que confío en que pueda serte útil
también a ti, amable leyente, en caso de que te estés planteando autoeditarte
en Amazon.
Amazon cobra
por editar cada ejemplar de tu obra. Aplica dos tarifas al respecto: una
genérica según las características del libro y otra específica según el número
de páginas. Una vez calculado el coste de edición, puedes decidir si marcas un
beneficio para ti. A ese precio de venta se le añaden los impuestos que rigen
en cada “mercado” donde vendas tu obra. Esta tarificación se aplica tanto a la
edición impresa como a la digital.
En mi caso,
opto por no marcar beneficio. Pese a ello, recibo ingresos esporádicos por
ventas que me transfiere Amazon –en concepto de “regalías”–. Ingresos que
interpreto como un aliciente de productividad que me envía una empresa para la
que es rentable mi trabajo, ya que no les supongo más gasto que el que conlleve
mantener mis referencias editoriales en sus servidores de Internet.
También creo
que esos pagos los hacen para cubrirse las espaldas de cara a cualquier tipo de
demanda que se les plantee. Con esos ingresos dejan constancia de que se te
reconoce autoría y que eres responsable de ella –de hecho, cada año te llega
una carta de la agencia tributaria estadounidense, la IRS, para que actualices
tu situación fiscal–.
Resumiendo: no
marco beneficio sobre el precio de mis obras, pero éstas me generan ingresos
por defecto.
También se me
olvidó comentarle a la atenta Mag, que a estas “regalías” económicas se une
el que Amazon regala ánimo a sus autores: establece una serie de listas de
ventas que son tan profusas que es difícil que tu obra no encuentre reflejo en
ella.
Por ejemplo:
mi última obra –comercializada desde el viernes día 12 de este mes– ocupa el
puesto 307 de ventas en la lista “Novelas juveniles de acción y aventura”. Y
eso que aún no había subido el texto para su edición electrónica, ni había
anunciado su publicación fuera de este blog –sólo mi apreciada Clarisa Tomás Campa se había hecho eco
de su aparición–.
Dos de mis
obras han ocupado el número 1 de ventas en sendas listas, lo que me permite
calificarme como “autor superventas en Amazon”. Quien no se consuela es porque
no quiere.
Confío, cordial
leyente, en que esta entrada te haya resultado amena. Y si te apetece leer
textos tan amenos como estimulantes, te invito a que visites el blog de Mag.
Una vez allí, formarán parte de ti sus letras, sus palabras, sus frases, sus
sentimientos… https://latrastiendadelpecado.blogspot.com/
Gracias por tu
compañía lectora.
Nino
Ortea. Gijón. 2022.