El compañero Pepe, desde el blog «El tintero de oro», coordina una convocatoria creativa bajo el lema MICRORRETO: ¡Cita a la vista!
Pepe
nos invita a escribir un microrrelato a partir de una cita literaria con una
extensión máxima de 250 palabras. Espero no ser descortés con su invitación…
¡pero a mí me ha salido un audiorelato! J
Mi cita tiene su
origen en una frase pronunciada en una teleserie estadounidense, lo que me ha
llevado a desarrollarla como un cuento teatralizado: «El
arrebato “Bob”». Para escucharlo, sólo tienes que
reproducir el siguiente video:
La que sigue es
la transcripción en 249 palabras de esta llamarada sonora. El texto presenta
algunas diferencias con la versión dramatizada, durante cuya grabación me
dominó cierto frenesí interdimensional.
«El
arrebato “Bob”»
¡No
fui yo quien secuestró a Laura!
¡Fue
el otro!
¡¡Fue
Bob!!
Yo
cargo con sus culpas.
Lo
conocí por azar mirándome al espejo.
Al
verlo se me quedó el cabello blanco.
Desde
entonces llevo el cráneo rasurado.
Me
lo tropezaba algunas noches.
Aparecía
en el retrete de cualquier bar, tras haberme tomado unos tragos.
Al
principio nuestro comportamiento era normal.
Quitábamos
las bebidas a las parejas aprovechando sus momentos juguetones o nos hacíamos
un “simpa”.
Al
tiempo empezó a mostrarse agresivo, máxime si había cerca alguna rubicunda a la
que apurar.
Bob
estaba empeñado en llevarme a “La logia negra”.
Me
negaba a visitar un lugar que resonaba a templo de la salsa.
Al
final los porteros me echarían por ponerme meloso con las mulatas.
Durante
unos meses caí en el olvido de Bob.
Mi
vida fue aburridamente feliz.
Mi
felicidad se sustanciaba en quedar con Laura para espabilar mi aburrimiento.
Aunque
en principio fingió no darle importancia a lo de mis prótesis, tras el
accidente las cosas nunca fueron igual.
Finalmente
me ha dejado por un butanero ucraniano de nombre tan impronunciable como
inabarcables son sus músculos.
Anoche
fui a su casa a recoger mis cosas.
De
repente, como en una toma involuntaria de cámara, vi a Bob.
Cerré
los ojos presa del miedo, oí su carcajada y olí su aliento fétido susurrándome:
Fuego, camina
conmigo.
No
recuerdo nada.
Mi
fotografía aparece constantemente en los informativos.
Laura
ha desaparecido.
Me
acusan de su secuestro.
Tengo
que encontrarla.
“Fire, walk with me” –Fuego camina conmigo– es una frase extraída
de la teleserie estadounidense «Twin Peaks» (creada por David Lynch y Mark Frost, 1990-2017).
Para leer
las aportaciones creativas de mis compañeros, sólo tienes que pulsar en este
enlace:
El descarnado Bob ha vuelto a encarnar otro arrebato. Quizá te apetezca leerlo
https://venyenloquece.blogspot.com/2023/05/microrreto-la-paleta-de-las-emociones.html
Gracias
por tu escucha/lectura atenta, amable escuchante/leyente.
Hola:
ResponderEliminarSi te apetece leer otros de mis textos inspirados por David Lynch o su obra, sólo tienes que usar este enlace. Gracias.
https://venyenloquece.blogspot.com/search?q=lynch
Hola Nino, vaya cambio de look, estas muy guapo....
ResponderEliminarSabes lo que dice mi flor peluquera, que va a sacar sus afiladas tijeras a pasear.
Ya que ha visto un lindo matojo cabelludo, jajaja.
Sabes esta muy bien el relato tanto como el video de Twin Peaks.
Yo no recuerdo haber oído esa frase, ahora que tampoco era mucho de seguir esa serie.
Te deseo un feliz fin de semana y un lindo viernes para ti y frambuesa.
Saludos televisados de flor. 📺⚽🥅
Muy original el podcast, Nino. Y vaya voz que tienes!! Me aconsejas volver a ver la serie? Besos. Maite
EliminarSabes nunca había oído tu voz y la verdad es que con la musiquilla de fondo
Eliminary tú voz , la verdad es que se pasa un pelín de miedo , jajajajaja
bromas a parte esta muy logrado , te podrías ganar la vida haciendo audio novelas
te informo de que medió la vena , y acabo de publicar otro micro-reto para el tintero de oro espero que te guste , se llama "El carnicero" chao amigo radio-novelero.
Hola, Flor:
EliminarGracias, de no haber sido por ti no habría publicado este relato. Tú me hablaste de la convocatoria y me animaste a participar en ella.
¡Y ya ves cómo me desmeleno en el audiorelato, je je! Aunque mi peinado no sea exactamente a lo “bob”, sino que a lo greñas, je je.
Respecto a la frase “Fuego, camina conmigo”, aparece en el primer episodio de la primera temporada –también en el piloto que se estrenó en cines y en video como una película autónoma–. La pronuncia el personaje de “El hombre manco”, quien nombra por primera vez a Bob mientras declama una cuarteta. Luego esta frase aparece en otros episodios y da título a una película de David Lynch sobre los últimos días de Laura Palmer.
Ahora me paso a lleer tu nuevo relato y te comento.
Un abrazo, Flor.
Aquí estoy de vuelta tras haber leído tu relato.
EliminarNo quiero destripar la historia a sus futuros leyentes, pero
Los dos hemos presentado sendos relatos protagonizados por asesinos violentos. Parece que el Tintero no será “de oro” en esta convocatoria, sino ”sangriento”.
Feliz fin de semana para ti y los tuyos, Flor.
Hola, Maite:
EliminarGracias, pero la calidad de la grabación es mejorable. Para otra será.
Sí, te lo aconsejo.
Un abrazo, Maite.
Interesante historia donde una personalidad siniestra toma el control. Muy buen audio y relato, te deja con el corazón encogido de pena. Saludos.
ResponderEliminarHola, Ana:
EliminarGracias por tu valoración positiva. La grabación es mejorable tanto en locución como en calidad de sonido; pero mis limitaciones siempre estarán ahí, así que decidí publicar el audiorelato ya que si no, probablemente nunca lo haría.
Un abrazo, Ana.
Siempre hay otro al que echar la culpa de nuestras desacertadas decisiones. y más cuando la cabeza no rige a causa de la bebida o la desesperación. En todo caso habrá que contrastar pareceres con ese Bob que se esconde al otro lado del espejo.
ResponderEliminarAbrazo.
Hola, Francisco:
EliminarGracias por venir y enloquecer.
Sí, somos legión los pluriempleados que tenemos como trabajo alterno el de proyeccionista y estampamos nuestras frustraciones en pieles ajenas.
Quizá la envidia vil, que nunca es sana, embrutece más que el alcohol y nos lleva a cubrir de bilis ese reflejo en el espejo que nos muestra nuestra realidad cruda.
Un abrazo, compañero.
te has identificad tanto con el personaje que te has puesto su foto de foto de perfil, aunque le des un tono humoristico en algun momento. el aire d twin peaks muy logrado con la musiquilla. has explicado en un plis, lo que tanto cuesta llegar a deducir en la serie.
ResponderEliminarrecuerdo cundo de crio, fuimos al cine a ver cabeza borradora, sin saber exactamente qué era, por aquel entonces, y los comentarios de mis amigos hacia mi, a la salida: "en tu puta vida vuelves a elegir tú la pelicula"
saludos lo he pasado bien, y muy entretenida la presentacion
Hola, Gabilante:
EliminarGracias por venir y enloquecer.
Sí, he intentado ser un esperpento de Bob, de ahí que refleje como perfil su reflejo en el espejo. En unos días lo habré cambiado.
La música que malsuena de fondo es la del tema para Audrey de la bso de Twin Peaks –lamento no tener mejores medios de grabación, me habría gustado incluir ese tema como pista de fondo, pero mi programa gratuito de edición de video sólo permite usar una pista–.
Tardé en ver “Cabeza borradora”, lo hice en video y sigo sin saber exactamente qué vi, pero la experiencia me resultó fascinante (como soñar dentro de un sueño ajeno). Incluso el documental “Eraserhead Stories” me pareció un nuevo laberinto, no un hilo de Ariadna que me sacara de mi ignorancia.
Gracias por tu afable comentario, compañero.
Estupendo tu micro, Nino. Has contado muy bien el desdoblamiento de personalidad del protagonista y la dramatización genial.
ResponderEliminarHola, Marta:
EliminarGracias por tu comentario, compañera. Es siempre un estímulo el recibir palabras de aprecio de alguien con tu valía creativa.
Me sorprende y anima el que la dramatización esté siendo de vuestro agrado.
Un abrazo, Marta.
Me gusta ese tratamiento del cuento desde un Jekyll y Mr. Hyde'. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarHola, Carlos:
EliminarAdmiro tu escritura, tu uso del lenguaje, tu adecuación de la cadencia métrica y la cercanía con la que haces de tu “tú” nuestro “nosotros”. Atesoro cada palabra de tus comentarios.
Creo que Stevenson es un gran autor, que –por suerte– ha contado con excelentes traductores al español. Me honras al citar su “Dr. Jekyll y Mr. Hyde”.
Un abrazo, Carlos.
El tema del otro, el alter ego asesino, la personalidad oculta y destructora, es todo un tema para ciertas ficciones. Que supiste emplear muy bien.
ResponderEliminarY es él, el protagonista, que quiere encontrar a Laura. Y tal vez lo haga, no necesariamente está muerte. Hasta podría salvarla si Bob no se interpone.
Saludos.
Hola, Demiurgo:
EliminarAnte todo te pido un favor: avísame la próxima vez que coordines un “jueves de relatos”. Me gustaría ensoñarme en tu inspiración onírica, si estoy de ánimo.
La dualidad –la figura de “El otro”– me ha llevado a largas reflexiones vitales y a quiméricas divagaciones creativas. Una de mis novelas incompletas trata de ello: no supe marcar la diferencia entre realidad y ficción, me perdí y ahogué en su trama.
Muy interesante tu enfoque narrativo: sí, puede que Bob prefiera afrontar la culpa que el fracaso y opte por verse como asesino antes de aceptarse como abandonado por Laura.
Gracias, Demiurgo, tu ingenio es prodigioso.
Una doble personalidad siniestra que por momentos toma el control, muy bueno, Nino
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Mujer de negro.
EliminarGracias por tu comentario, las palabras de aprecio ayudan a dificultar que el desánimo tome control.
Un abrazo, compañera.
Magnífica serie que nos tuvo sentados frente a la tv, en una época en la que no existía esto del 'streaming'. Tu micro y ese desdoblamiento o dualidad de personalidad es totalmente fantástico, y fantástico también el audio, resulta interesante escuchar un relato, la entonación de las palabras, la música que envolvente...me recuerda a las radionovelas de los años 60/70. Fabuloso! Me ha encantado! Saludos.
ResponderEliminarHola, Mayte.
EliminarLo magnífico es el recibir comentarios como el tuyo, que me tiene sentado alegre frente a la pantalla.
Lo fantástico es encontrarse con palabras afables como las que me dedicas, Mayte, que me recuerdan a las palabras de ánimo que escuchaba allá por los años 60/70 cuando aprendía del afecto, no de las riñas.
Fabuloso es contar con compañías como la tuya.
Un abrazo, Mayte.
Una doble personalidad. Siempre son interesantes y dan mucho juego. En algún sitio leí, vi -puede que hasta una película hsya- de multiplicidad de personalidad. Muchas.
ResponderEliminarTu texto y tu voz -has de parecer más asustado 😱,,- dan en el clavo de esa asintonía.
Un lujo leerte. Besos.
Mağ ~ Mağade Qamar ha comentado "Microrreto: ¡Cita a la vista!"
ResponderEliminarHace 3 horas
Una doble personalidad. Siempre son interesantes y dan mucho juego. En algún sitio leí, vi -puede que hasta una película hsya- de multiplicidad de personalidad. Muchas. Tu texto y tu voz -has de parecer más asustado 😱,,- dan en el clavo de esa asintonía. Un lujo leerte. Besos.
Hola, Mağ.
EliminarEl lujo es contar con tu estimulante compañía.
Quizá la práctica de la escritura creativa sea un ejercicio de esa doble personalidad presente en nosotros. No sé si es tu caso, pero en el mío son muchas las veces en las que la escritura fabulada es un acto fabuloso de posesión en el que mi heterónimo Nino Ortea toma el control de lo escrito y es mi persona, Nino, quien lo exorciza al editar los textos.
Un abrazo, Mağ .
Uff Nino. Aún recuerdo la serie. Al igual que tu relato, misterioso he inquietante. Una cita con mucha fuerza. Un placer leerte. Saludos
ResponderEliminarHola, Nuria.
EliminarLa fuerza la dan palabras de ánimo como las que me dedicas. Gracias.
Me alegra leerte que has encontrado en este relato cierta evocación del misterio de la teleserie inquietante.
Un abrazo, Nuria.
-excelente y terrorífica manifestación del "doble". Esperemos que Bob se haya limitado a secuestrar (que no es poco) y le de otra chance a Laura. Un saludo
ResponderEliminarHola, Juana.
EliminarExcelente. Así me siento ante tu comentario que secuestra la inseguridad que produce el liberara todo trabajo creativo.
No lo dudes: en la parte de este audiorelato que es tuya, Laura pasea libre por tu fértil creatividad.
Gracias por darme esta chance lectora, Juana.
Hola Nino. Lo primero felicitarte por tu dramatización y prestar tu voz al relato. Es recurrente y da para mucha caña narrativa e interpretativa la doble personalidad, en la que la dominante hace jugarretas. ¿Hay cierto deje de ironía en el relato... o me lo ha parecido? Enhorabuena y bienvenido, Nino.
ResponderEliminarHola, Tara.
EliminarLo primero agradecerte tu cordialidad. En estos tiempos de ignorantes ingratos, es de destacar el que alguien te dé la bienvenida. Y por suerte sois muchos los compañeros que me hacéis sentir acompañado. Siempre es buena hora para sentirte doblemente agradecido por una acogida cordial: como persona y como personalidad literaria.
Sí, hay un intento de ironía en el personaje. Con ello intento reflejar una leve posibilidad de esperanza para él, con esa ironía insinúo el desagrado que le produce su personalidad agresiva.
Gracias, Tara.
¡Hola, Nino! Bueno, bueno... Desconocía tu canal y ya me he suscrito. De técnica sonora y demás no entiendo, pero lo que cuenta, tu voz y cómo has "interpretado" me ha encantado. No es una lectura, sino que Bob casi te ha poseído, ja, ja, ja... La figura del Doppelhanger, de ese doble de uno, quizá su parte oscura, es siempre un recurso muy atrayente para el lector. En tu micro, nos lleva a plantearnos si el personaje es la tapadera de Bob, o en realidad es Bob el demonio que lo posee. En todo caso, has logrado transmitir la perturbación del mismo de una manera muy intrigante. Por cierto, también fui fan de la serie. El agente Cooper y su grabadora me chiflaban. Al menos la primera temporada, luego creo que se estiró como un chicle. Un abrazo!
ResponderEliminarHola, David:
EliminarGracias por tus palabras y por tus muestras de aprecio.
Mi intención es la de actualizar con cierta frecuencia ese canal en Youtube al que, amablemente, te has subscrito. También me propongo participar en las generosas propuestas de tu “Tintero” y de los “Jueves de relatos”. Acabar alguna de las novelas que tengo empezadas, presentarme a concursos literarios, mejorar el contenido de este blog… Son muchos los campos en los que puedo mejorar y en otros en los que debo hacerlo. En octubre hará tres años que comencé mi retirada de la Realidad: dejé mi trabajo y, progresivamente, me he ido dejando de autoexigir. Mi calidad de vida ha empeorado y mi ímpetu vital menguado. Sigo siendo yo, pero estoy siendo otra persona. Me he convertido en un extraño, en el otro. Si el “Bob” de Twin Peaks torturaba vidas ajenas, mi “Bob” ha ensombrecido la propia.
Soy esa voz en mi relato que grita ”Tengo que encontrarla”. Tengo que encontrar un empleo: como fuente de ingresos y como imposición de socializar. Tengo que encontrar la forma de dejar de ser el “otro” y volver a ser yo.
Disculpa este soliloquio, David. Pero hoy he cumplido 57 años y llevo en revolución contra el “otro” todo el día.
Gracias por todo, te mando un sincero abrazo.
Estos personajes interdimensionales son peligrosos, por fortuna no afectan sino a unos pocos, hay que cuidarse de ellos en todo caso, evitando invocarlo y evitando espejos y otros portales.
ResponderEliminarComo Bob todos son malvados.
Y que buena idea la de poner voz a los relatos es algo absolutamente unico en estos retos de tintero.
tienes arte en todos los sentidos
Hola, José.
EliminarTe agradezco tus palabras de aprecio y de ánimo.
Tal y como le acabo de comentar a David, llevo un tiempo sobreviviendo como el “otro”. Confío en empezar a vivir contento con quien soy.
Sí, invocar a seres interdimensionales, sacarlos de “La logia negra” es peligroso. Ya ves lo que le ocurre al agente Cooper en la teleserie. El mal, con minúsculas y cotidiano, está en muchos de nosotros. Mi “Bob” ha secuestrado mi ilusión, por suerte no la ha matado.
Me he sentido muy contento al leer tus palabras de aprecio, José. Tienes el arte de hacer que el extraño se sienta cercano. Luego me paso a leerte en tu blog, con calma. Ahora he quedado.
Muchas gracias por tu tiempo de ánimo, compañero.
Una serie icónica Twin Peaks. Reconozco que el final no es de los que más me gustan, pero la serie la he visto tres veces y las tres la he disfrutado. Muy buen micro.
ResponderEliminarUn beso.
Hola, Rosa.
EliminarGracias por tu comentario.
Sí, los sucesivos finales de temporada de Twin Peaks no gustaron a la mayoría de su audiencia. A mí me encantan los finales que son un nuevo principio, así que los disfruté. Aunque reconozco que a mitad de la segunda temporada, cuando intentan localizar “La logia negra”, mi pareja dejó de seguir la serie y yo la veía grabada cuando ella no estaba, lo que le daba una intensidad especial a esa tanda de episodios.
Un abrazo, Rosa.
Felicidades Nino por el texto y el audio muy original la manera de presentarlo. un saludo.
ResponderEliminarHola, Ainhoa.
EliminarGracias por este comentario, compañera.
Vuelvo a felicitarte por vuestro texto “Aferrarse”.
Un abrazo, Ainhoa.
Hola Nino ante todo me alegre verte, leerte y escucharte, conozco la serie, en tu entonación marcas esas pausas y exaltaciones, tanto que de este relato podría salir una novela de suspense...
ResponderEliminarHay que andarse con cuidado :P a mi me has puesto algo nerviosa jajaja...
Llegas tan real, con esa intigra nos adentras mucho mas de lo que se siente
al leerlo, es fantástico... como cuando le ponermos voz a nuestros escritos y
al menos para mi... acercan a quienes te escuchamos.
Un abrazo, mis mejores deseos para ti y feliz inicio de semana.
( Yo no suelo escribir relatos, en una poesía complicado el reto...
mi admiración Nino )
Hola, Cora.
EliminarGracias por tu comentario, cuidado y detallado. Me emociona releerlo, como bien sabes, compañera, el momento de hacer público un texto suele venir acompañado de cierta incertidumbre. Además, en mi caso, cuando comporto un texto suelo buscar que éste resulte entretenido. Así que: gracias por tus palabras.
La publicación de este audiorelato fue resultado de un impulso: la compañera Flor me avisó de la convocatoria; cogí y lo grabé (ya estaba escrito, sólo tenía que corregirlo y adecuarlo para su teatralización). Suelo fagocitar mis textos, así que... ¿quién sabe si de éste podría salir un cuento?
Al interpretar un texto propio condicionas su interpretación, ya que un audiolibro es una lectura guiada. Esta limitación de la interpretación lectora era algo que me preocupaba. Por lo que agradezco vuestras apreciaciones.
Ahora me acerco a leerte, Cora.
Mi agradecimiento.
Hola Nino. Dos en uno, no solo nos traes un relato escrito, sino que tenemos el lujo de escucharlo de tu voz. El pobre protagonista está poseido por otra versión de sí mismo, una cara más negra y oscura, esa que sin duda todos tenemos, que en su caso lo lleva a cometer una locura tras otra hasta ese dramático final. Gran micro. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Jorge.
EliminarEl lujo está en leer vuestras palabras de aprecio.
La figura del “otro” siempre me ha acompañado. La cimenté ya en el colegio, para que fuera la diana a la que mis maestros dirigían sus desprecios. Y, desde entonces, está aquí. Por suerte, mis “sosías” no son malignos; pero no por ello he dejado de hacer daño ocasional a quien buscaba mi bien.
Un abrazo, Jorge.
Después de escuchar el relato puedo decir que me ha gustado mucho la dramatización sonora que has hecho del mismo (sin limitaciones técnicas tendría un plus). En cuanto al relato en el que tú protagonista descubre su doble personalidad, me han gustado mucho las elipsis que introduces para jugar con el espacio y el tiempo de tu micro. El personaje puede ser un buen modelo inicial para un asesino en serie o no.
ResponderEliminarMuy buen relato. Un abrazo.
Hola, Carles:
EliminarGracias por tu comentario, compañero.
Me alegra leer tu apreciación positiva de la grabación. Las limitaciones técnicas están ahí; pero ya lo estaban cuando lo subí y decidí compartirlo, así que asumo su calidad sonora mejorable. Además, en cierto modo lo buscaba: quería enfocarlo como grabaciones hechas a un contestador telefónico, el de Laura, y realizadas mientras me movía en estado agitado de ánimo.
Te agradezco tu comentario sobre el uso de las elipsis, me planteé no comenzar con una prolepsis, al ser una narración corta y deshacer con su uso el suspense, pero me gustaba contarla así.
Las narraciones en “continuará” son mi debilidad, imagino que como consecuencia de mi condición de lector de tebeos, así que suelo escribir ficciones abiertas.
Muchas gracias por tu compañía lectora, Carles.
Hola, Nino, el relato es genial, pero si lo enlazas con la dramatización se ensalza aún más. Qué envidia poder interpretar tus letras de ese modo. El relato también se las trae. Es una oda a la locura y a la novela negra psicológica. Me ha gustado mucho la figura de Bob, ese ente que parece vivir dentro de el mismo protagonista y lo atormenta hasta llevarle ha hacer cosas sospechosamente inmorales. Y que te hayas apoyado en Twin Peaks aun me gusta más. Se palpa la atmósfera de Linch en cada rincón. Una apuesta arriesgada y que la solventaste con una notaza.
ResponderEliminarFelicidades y un abrazo!
Hola, Pepe:
EliminarGracias por tu organización de esta convocatoria creativa.
Te agradezco tu comentario revitalizante; y a la vez, dada tu condición de coordinador del encuentro, agradecer a todos los compañeros del “Tintero” sus lecturas comentadas.
Quizá al interpretar el texto estoy condicionando su disfrute, a la para que lo hago más mío.
Este “Bob” es hijo del arrebato y de la frustración, vive en el protagonista y, quizá, haya llegado a ser su personalidad dominante. Si mi heterónimo vuelve a inspirarse en Twin Peaks –ahora mismo lo está por el cine de John Huston– quizá sepamos más de éste “Bob”.
El cine de David Lynch fue, es y será arrebatadoramente sugerente y sugestivo.
Muchas gracias por todo, Pedro.
Una forma original de publicarla, me ha gustado... En estos casos siempre me queda la duda de si la personalidad malvada toma el control por un momento, o si en realidad es la única personalidad que existe y sólo estaba dormida...
ResponderEliminarHola, Beauséant:
EliminarGracias por tu comentario.
De mi experiencia creo que la personalidad malvada es la que define a estas personas, aunque muchas veces sepan fingir y ocultar su vileza. Cuando las excusas se repiten, son en realidad razones. Y todos los que tienen a mano la excusa del mal vino o del mal día para justificar sus agresiones recurrentes, son en realidad unos malhechores. Prueba está en la mucha presencia de comentaristas insultantes en nuestros blogs que se ocultan en el ¿anonimato?.
Un abrazo, Beauséant.
Hola Nino, muy bueno tu micro y me gustó la forma de publicarlo, tanto leerlo como escucharte, el personaje tremendo, con su doble personalidad, por lo menos es lo que a mi me da por creer, él y Bob son la misma persona, malvada, muy bueno, saludos. PATRICIA F.
ResponderEliminarHola, Patricia:
EliminarMuy grato tu comentario y muy de buen gusto tu forma de publicarlo.
Procuro evitar caer en el maniqueísmo de ver la coexistencia humana como una batalla entre el Bien y el Mal. Estamos los grises, quienes hacemos mal a otros sin proponérnoslo. Pero no es maniqueista sostener que el mal tiene muchos maniquíes y la maldad nos tiene mucha tirria a quienes la conocemos pero la ignoramos. Nos tiene mucha saña la alimaña.
Quizá nuestro logro sea no caer en su engaño, en alejarnos y dejar que vaguen en pena, como “Bob” en su “Logia negra”. Seguirles el juego conlleva el peligro de amalgamarnos en ello, como ocurre en el Twin Peaks televisivo.
Un abrazo, artesana de la palabra. Un abrazo, compañera Patricia.
Hola, Nino. Me han gustado las dos versiones. Esta muy bien construido el personaje con esa , creo yo, doble personalidad que atormenta al protagonista. Un gran trabajo la creación de la personalidad de Bob, ese cabroncete que lleva al personaje a la maldad mas absoluta.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Pedro:
EliminarMe han alegrado las dos valoraciones de tu comentario: la del lector y la del escritor. Saber que al lector le ha gustado y que el lector lo ha apreciado, me estimula.
Para la inspiración sobre personajes malvados hay mucha inspiración cotidiana. La maldad cotidiana se reviste de anonimato, pero todos sabemos su nombre. Y aunque se crean legión, en ellos hay mucha soledad.
Un abrazo, Pedro.
uN TEXTO MALO mAL ESCRITO JODIDO MALA VOZ Y SIN GRACIAS
ResponderEliminarY por qué no te vas a la mierda y dejas de joder , con tu verborrea repugnante , anónimo.
EliminarHola Nino, tienes un correo mío, te lo acabo de mandar.
ResponderEliminarTe mando un cálido abrazo compañero.
Hola, Flor:
EliminarRecibidos este abrazo y ese correo.
Redoble de agradecimientos, compañera.
Gracias sinceras, Flor.
Excelente micro!
ResponderEliminarY me encantan las imágenes que usas, como ésta:
"me ha dejado por un butanero ucraniano de nombre tan impronunciable como inabarcables son sus músculos."
Enhorabuena y un abrazo!
Buenos días, Voralera:
EliminarGracias por tu comentario amable. El que una autora de su sensibilidad, con tu acierto para el uso de símiles o metáforas, aprecie calidad en mis hipérboles, eleva mi ánimo a lo hiperbólico.
Sí, aciertas: en hora buena habéis llegado personas como tú a este blog.
Gracias por el estímulo de tu compañía, Voralera
Ah, y también me gustó el audio. Me acabo de suscribir
ResponderEliminarMe han encantado tu voz, tu tono, tu dicción... Y tus audios tienen gran calidad. Intentaré mejorar la calidad técnica de mis próximas grabaciones.
EliminarUn abrazo, Voralera.
Hola, Nino. Estos desdoblamientos de la personalidad siempre acaban mal, algunos muy mal como es el caso y el pobre no se entera: la culpa es de Bob. Magnífico relato y gracias por el audio, algo inusual por estos lares.
ResponderEliminarHola, Isan:
EliminarGracias a ti por tu lectura atenta del relato y por este comentario afable.
La mayoría tenemos varias personalidades, sin ser ninguna de ellas peligrosas (salvo para el buen gusto, que las resacas emocionales pueden llegar a ser más fuertes que las físicas). El narrador calvo de este relato (Robert) culpa al melenudo (Bob) de sus desmelenes, al igual que muchos culpamos a nuestras carencias del pasado de los excesos de nuestro presente.
Un abrazo, Isan.
Genial relato me gusto mucho. Te mando un beso. Enamorada de las letras
ResponderEliminarHola, J.P.
EliminarGracias por tu valoración positiva. Un abrazo.
¡Me encantó! ¡El micro te quedó espectacular!, ¿y qué decir del audiocuento(no sé si existe ese término, sino me lo acabo de inventar jaja)? La interpretación del personaje está muy bien lograda, se trasmitió perfectamente ese tono de duda, de confusión, de alguien que no sabe la verdad, o que la sospecha, pero se niega a reconocerla.
ResponderEliminar¡Me ha encantado, enhorabuena!
Un abrazo.
Hola, Cynthia, gracias por tu espectacular comentario.
EliminarEl micro quedó tal y como quería, me reconforta leer que te ha gustado. El audiocuento es mejorable, el saber que ha gustado me anima a abordar esas mejorías.
En mi entender la historia, Robert prefiere ensoñarse como asesino a saberse un “don nadie”. Laura se ha ido, cansada de que él vaya a su casa a montarle un escándalo cada vez que se emborracha.
Un abrazo, Cynthia.
Inquietante el protagonista, que se confunde a lo "Dr Jekyll y Mr. Hyde" cuando lleva una copichuela de más! Muy bueno el relato, porque te pone en la cabeza del protagonista y en su "aparente" confusión! David Lynch es siempre inquietante, y para mi gusto, " en ocasiones" genial! Ja, ja! Saludos!
ResponderEliminarHola, Marifelita:
EliminarHan sido muchas las ocasiones en las que he sentido que la ingesta de alcohol era una mera herramienta para conseguir un fin: relajarte, integrarte, olvidarte... También lo he visto como excusa para acercarte a tus deseos. Y como bebedizo con el que invocar a tus demonios internos. A diferencia de Poe sostengo que el diablo está en nosotros, no en la botella.
David Lynch es un creador genial. Su cine, laberíntico, puede producir en nosotros la sensación de que se le ha olvidado el simple arte de narrar. Pero, a quien le guste lo simple se le olvida que el arte no está en lo que se cuenta sino en cómo se cuenta.
Gracias por tu comentario, Marifelita.
Hola, Nino. El maestro Lynch me impactó con la prinera temporada de Twin Peaks. La última reconozco que no la he entendido (si hay que entender la obra de Lynch). Pero, desde luego, su trabajo no deja a nadie indiferente.
ResponderEliminarMe ha gustado tu relato. Se nota el cariño y la pasión que gas puesto en él. Enhorabuena.
P. D.: buen relato leído.
Hola, Bruno:
EliminarLa tercera temporada de Twin Peaks tiene una narrativa cimbreante. Tuve que ver dos veces el tercer episodio, ya que la primera vez me estaba saturando.
Creo que una obra artística hay que disfrutarla con los sentidos, no descuartizarla con la razón. Si descomponemos el Arte, éste pierde todo sentido y el Quijote se reduce a las crónicas del delirio de un loco.
Gracias por tus palabras de aprecio hacia el relato y el audio.
Un abrazo, Bruno.
Me acuso, tuve que leerlo dos veces para entender.... dos personas en un mismo cuerpo. De terror. Me pregunto quien de los dos seria el real? Seria Bob el del espejo o el que lo descubrió. ?
ResponderEliminarHola, Gustab:
EliminarGracias por tu relectura, lamento que no quedara clara esa parte esencial de la trama: la doble personalidad. Pienso que el real, es el Bob del espejo, la de Robert es la personalidad que el individuo adopta para ser aceptado socialmente.
Un abrazo, Gustab.
Hola Bob, digo Nino. Me ha encantado el relato y sobre todo escucharlo. Enhorabuena y un abrazo.
ResponderEliminarHola, Lola:
EliminarEncantado con tu encanto. Te agradezco sinceramente tu comentario.
Un abrazo, compañera.
Hola, Nino. Ha sido divertido oir y leer al tiempo tu micro, encima con referencia a una de mis series favoritas. Creo que con decirte, que las dramatizaciones radiofónicas han sido uno de los pilares de mi incondicional gusto por la radio, no hace falta añadir más.
ResponderEliminarSaludos
Hola, JM:
EliminarMe alegra leer que te ha divertido la lectura y escucha del micro. De haberle dedicado más tiempo a la dramatización, su grabación habría tenido más calidad; pero es probable que no la hubiera subido de no ser por “el calor del momento”.
En España, desconozco tu país de procedencia, las ficciones radiadas apenas tienen presencia. Las escucho puntualmente en Radio 3 o Radio 5 de RNE (la última que oí fue una dramatización de Galdós).
Un abrazo, JM.
Hola, Nino, de nuevo. Pues sí al desaparecido cuadro de actores que tenía RNE, en parte me refería. Así, a modo de ejemplo: Jesús Puente haciendo de Sherlock Holmes o José María Caffarel como comisario Maigret. Eso y luego las narraciones de Radio 3 antes de ser la actual, cuando compartía programación con la UNED, y la de hasta hace unos años que también había algún cuento interpretado en su parrilla.
EliminarSon otros tiempos como ves y al escuchar tu micro me han venido a la cabeza como fogonazos.
Saludos
¡Hola, JM!
EliminarAnte todo: te felicito por tu buena pluma literaria y te agradezco el que compartas tu gran tinta.
Recuerdo escuchar junto a mi madre al “Maigret” de José María Caffarel (por cierto, he visto la peli donde Depardieu encarna al comisario y menuda decepción). No recordaba al Holmes de Jesús Puente, a ver si lo encuentro en la Red. Creo que en la última adaptación de RNE a Holmes lo interpretó Sergio Peris-Mencheta (no me gustó, pero no estaba yo en un buen momento).
Un abrazo, JM.