-->
Tu novio no lo dice, pero me mira mal.
¿Quién es el chico tan raro con el que vas?
Cuando yo estoy delante me trata muy normal,
y a solas me describe como un anormal.
Cualquier noche los gatos de tu callejón
le aullarán a gritos esta canción:
Porque yo tengo su tele en mi salón, uo-o-oh!
Porque yo veo la tele de ese sombrón.
Cuando yo estoy delante me trata muy normal,
y a solas me describe como un anormal.
Cualquier noche los gatos de tu callejón
le aullarán a gritos esta canción:
Porque yo tengo su tele en mi salón, uo-o-oh!
Porque yo veo la tele de ese sombrón.
¡Hola, enloquecidos!
Aquí me tenéis, un poco más chiflado que ayer pero, afortunadamente, menos delirante que mañana.
Y es que puede que tras el próximo amanecer me una al común de visionadores alienados por la televisión. Vamos que si de ésta no voy y enloquezco, sólo me queda el recurso de leer el Babelia e intentar entenderlo.
Digamos que estos días he estado ocupado realizando un estudio científico-tecnológico sobre las virtudes y ventajas que podría tener amaromarme a una conexión por cable que pasa cerca de mi mirador.
Ya sabéis eso de que a tiempo revuelto ganancia de pecadores; y en mi caso, en uno de estos días ventosos, el mismo Eolo que se había llevado mis mejores peluquines, bisoñés y postizos, ha tenido a bien acercarme un cordoncito, negro cual Obama, y portador de la savia de la sabiduría televisiva.
Lo más difícil, una vez vencido mi vértigo al inclinarme desde las alturas de la baranda, resultaba encontrar un momento en el que mi investigación no fuera malinterpretada por el legítimo titular del recibo domiciliado, como un intento de substraerle la señal divina del dios Megahercio. Pues nada más lejos de mi aprovechada intención que el substraer algo intangible… simplemente busco beneficiarme de compartir lo ajeno. Pero, claro, cualquiera se lo explica con mis antecedentes y nuestros precedentes.
Y es que a ciertas horas, y en ciertas posiciones, eso de ponerte a dar explicaciones es algo inexplicable; por lo que resulta más práctico esconderte en un armario, confiando en que el cornudo no te convierta en apaleado.
Pasando del colchón al balcón, el problema no estaba en que alguien me pillara escondido en el armario, si no colgando del ventanal; dado que, en ciertas posturas, y con ciertos artilugios en la mano, es muy difícil hacer creíble la mentira de que soy un apóstata del Comunismo, converso a la luz del Consumismo. Pues sabido es que todos somos muy generosos con lo ajeno y celosos de lo propio.
¡Cómo cambian las cosas! El domingo pasado, ni Juanito me dejaba a su novia para celebrar este San Valentín, ni Pepito estaba dispuesto a compartir su señal de cable; y es que hay mucho internacionalista solidario con las necesidades de los exóticos, pero indiferente ante las carestías del próximo, cuyas parvedades denosta como vicios, máxime cuando afectan a sus intereses o pasiones.
Y ahora, si las cosas salen como pintan, mañana veré su tele en mi salón, y el sábado compartiré caricias en su jergón. Pues resulta que el cuernos largos de mi vecino tiene por novia incondicional a la brujilda que, este día de los enamorados, tendrá sus idas y venidas con mi escoba mágica, mientras él la confía en casa poniéndose el termómetro.
Y es que eso de intentar convertir a alguien infiel en creyente, ya lo desaconsejó Mahoma en su salmo sobre la goma.
Bueno, allá él y su testuz; por fortuna le robo la señal por cable, no por antena, así que su “cornamento” no será impedimento para mi divertimento con el televisivo invento.
Quizás alguno os preguntéis si esta historia es verdadera, o me la he inventado entera.
Un caballero nunca lo aclararía, y un mentiroso nunca lo desvelaría; así que ahí os dejo, que tengo muchos anuncios por ver —lo admito, me encantan las pequeñas historias que cuenta la publicidad— y muchas ganas de asomarme este sábado al balcón de su escote.
Venga, cuidaros y quereros.
63'
© Nino Ortea. Gijón, 11-II-09
Casi me gusta mas tu letra que la de loquillo. Estoy seguro de que el gran Sabino firmaria esta version
ResponderEliminarMe dejas con ganas de saber mas de tu vecino y de su novia, aunque doy por sentado que la foto no es de tu balcon
No pares, Nino!
¡Felicidades Ninin!
ResponderEliminarAl leerte queda claro que has superado el período de luto, la pena fue que tras tu pérdida dieras con esa babaya
Hay veces en que me apetece leer uno de tus textos intimistas, pero lo que escribes ahora siempre me hace reir
Un besin+
Maite
Buenas!
ResponderEliminarEntre la pila de correos sin leer, habia alguno tuyo y con enlace al blog, pense que habia sido defenestrado del todo.
Pues veras que al final, el famoso cable te va a hacer decir: tanto rollo pa esto? espero que con la moza del vecin, no sea igual.
a ver si nos vemos, yo ando hecho papilla. Debo tar viejo.
Nino, si lo del cable ye verdad, el porno empieza a las doce.....
ResponderEliminarNino, si lo del cable ye verdad, el porno empieza a las doce.....
ResponderEliminarSolo te faltó poner el video de un hombre en el armario (la canción de la Carrá)
ResponderEliminarDisfrute de su vecina señor Cuesta
Hola, David
ResponderEliminar¿Qué te gusta mi letra? ¡Pero si es ininteligible! De pocas cosas me avergüenzo más que de mi grafía.
El otrora “gran Sabino” está demasiado ocupado escribiendo colaboraciones para ese “gran periódico” llamado La Razón, como para dártela a ti.
Ahora estaría bien que te dijera que la foto es del balcón del mierda, y que la muñeca hinchable que aparece es su novia, ¿eh?
Gracias, Maite:
ResponderEliminarNo sé si habré superado el duelo, pero sí que ya me había cansado de andar encogido.
En mi defensa diré que no di con ella, si no que vino a buscarme, resplandeciendo con una sonrisa que me deslumbró tras mi estancia en la oscuridad.
La verdad es que cada vez me da más pereza dejar la vida aeróbica y acercarme a Internet, veo que soy incapaz de adaptarme a sus códigos comunicativos o creativos. Tras el deslumbramiento inicial por La Red, me vuelve a tirar más el boli bic. De todas formas, este blog es un cuaderno vivo, en cualquier momento puede volver mi etapa intimista, aunque confío en que no la pesimista.
Me gusta hacerte reír. Tienes una sonrisa fascinante.
Cuídate
Muy buenas, Vampirito
ResponderEliminar¿Así que apilas el correo? ¡Coño, lo mismo que hacía el gran Vázquez con las facturas! Ves como lo tuyo es dibujar, lo predicen los Idus de Marcelus.
Sí, la verdad es que tengo el blog abandonado; pero es que ando liado, entretenido y ensimismado. Se me escapa el tiempo de las manos, ¡pero me lo estoy pasando chanchi!
Ahora que lo pienso: si le conecto el cable a la novia, ya no lo será del vecín, si no de Frankenstein.
Pues a ver si quedamos, la verdad es que últimamente parece que ando escondido, pero es que no doy pa más.
¿Tú, viejo? Venga, que los vampiros sois inmortales como Hacienda.
Lo que te habrá pasado, colmillos, será que la liaste con alguna pellejuda ajada; y a ti el ajo se te atraganta.
A cuidarse, jovencito, te lo dice tu amigo danoNino
¡Coño, espirituoso, te veo muy puesto en horarios tentadores!
ResponderEliminar¡Qué dura es la vida de casado, eh! Yo, pese a haberlo estado con la mejor, no pude pillarle el ritmo. Pero bueno, ya sabes de mi condición de … ¿cómo me definió la mustiadora?
Probablemente organice una partida de póquer en casa, ya me comentas lo de los horarios y los canales delante de mi telemorro.
Venga, a esperar a las 12.
Koguabunga!
Verás, Vega:
ResponderEliminarAunque mi corazón está que explota, creo que no es cierto il rumore: Para hacer bien el amor no hay que ir al sur.
¡Basta con una dieta adecuada de danoNinos!
No sé cómo estará la vecina de Cuesta, mi objeto del deseo es la ¿novia? De mi vecino.
Ya os cuento
COÑO NINO.......lo del poker ye de les mejores proposiciones que me han echo en muchu tiempu. Apuntome!!!!!!
ResponderEliminar¿va el Maverick del corte ingles?
¡Desde luego, embozadín, tiénesme embobau!
ResponderEliminarEso de que echar una timba de póquer, sea una de las mejores proposiciones que has recibido, me reafirma en el demonio del matrimonio.
Pues sí, con él cuento, aunque espero que no vuelva a poner en peligro tu dentición.
Esta vez bebemos en vasos de plástico, que ye más sano.
Viernes ya, jar!
Para estos momentos de crisis para algunos (otros aunque no salga en la tele estan permanenremente en crisis), mejor el consumismo que el comunismo. Como hace años en un lejano páis:
ResponderEliminarEl año del Consumismo:
con su mismo pantalón,
con su misma camisa
Guapa la novia de tu vecino, no?