Golpes Bajos - Tendré que salir algún día - En Vivo
Dada mi vida sin excesivas obligaciones, disfruto de bastante tiempo
cualitativo. Para protegerlo he tomado decisiones vitales que hacen que mi vida
muestre limitaciones en lo material y en lo social. Esta protección ha
provocado un aislamiento de los demás, privarme de algo tan humano como es
socializar con tus semejantes. Habitualmente, la compañía de mis congéneres me
aburre, molesta o irrita. Siento un gran desencanto social. Desencanto que me ha
ido convirtiendo en misántropo.
El haber recibido un comentario de mi amiga Flor me ha hecho reparar en esta conversión. Confío en estar aún a tiempo de
frenarla. De entrada, dentro de la tendencia a formular propósitos de enmienda
tan propia de estos arranques de año, me he propuesto acordarme de habilitar la
opción de comentarios en las entradas que comparta. Publicar en este bloc
digital es uno de los pocos actos comunicativos interpersonales que he
realizado desde que ha comenzado este año.
Gracias por el estímulo de tu compañía, amable leyente.
Te deseo un feliz año 2024.
Disculpad que haya estado ausente de Internet durante estas últimas semanas. Tenía que realizar un trabajo de edición editorial y debía cuidar el tiempo que paso frente al monitor, para evitar que la araña de la migraña se convirtiera en “Aracne”.
ResponderEliminarGracias a mi amiga Flor por haberme ayudado a desenredarme.
https://elbauldemislibrosyjuguetes.blogspot.com/
Aaaah! vale! Al leerte te había entendido que desencantado del género humano te habías aislado en tu cripta sin querer tener contacto alguno con nadie y que FLOR te había hecho ver que esa nunca es una buena opción, si por el contrario has estado entregado a la tarea de edición de tu nuevo libro con su ayuda, nada que decir.. a veces es necesario asilarse del mundanal ruido para que lo que nos taremos entre manos termine en buen puerto. Sea como sea, con esta preciosísima fotografía de la playa GIJÓN de cabecera que disfrutes de maravillosos paseos junto al mar ( me encanta el paseo que sube por la derecha y no se ve en la fotografía ; ) de todas las cosas buenas que tiene tu preciosa Asturias y de todo lo mucho y bueno que mereces y estoy segura te hará llegar durante este nuevo año 24 que acabamos de estrenar .. un abrazo fortísimo con una escala para que salgas de tu agujero cuando quieras y tu trabajo te lo permita.. el tema de Golpes Bajos, estupendo, además son de estas tierras : ) GraaciaasS! voy a darle insecticida a tu migraña a ver si te deja en paz : )
ResponderEliminarHola, MARÍA:
EliminarTu primera interpretación del texto es la correcta: tras haber leído un comentario de Flor, reduciré al mínimo posible las entradas que suba al blog en las que no se acepten comentarios.
El trabajo editorial era con una obra ajena: estuve maquetando el texto de un libro para que su autor lo pusiera a la venta en Amazon.
Esa parte de la playa de San Lorenzo y del paseo de “El Muro” me son vitales: a ese rincón del arenal iba de niño con mi madre y en la parte rocosa buscaba cangrejos y “llampares” (unos moluscos) con mi padre. En esa iglesia hice de Moisés en una recreación infantil de “Los 10 mandamientos”. En el parque aprendió mi hermana a patinar. En la base del paseo que mencionas está el colegio donde estudió mi madre; y el parque que culmina el paseo fue el fortín militar donde mi padre hizo la mili. Y éstas son unas pocas de las muchas vivencias que me unen a ese entorno.
Confío en que disfrutéis del día de Reyes.
Mis mejores deseos, MARÍA.
Bueno pues que haya sido para bien el encierro y tengas muchas alegrías con ese trabajo.
ResponderEliminarSalud.
Feliz año, Erik:
EliminarTe agradezco el que siempre me estés mostrando aprecio en tus comentarios.
Ese trabajo de edición me vino bien en lo económico.
Mis mejores deseos, Erik.
Para nada eres un misántropo, lo que pasa es que este mundo es muy puñetero y más para quien lo ve con mirada crítica. Feliz año, Niño! 😘😘🤴
ResponderEliminarFeliz año, Maite:
EliminarGracias por tus palabras de aprecio.
Sí, somos muy puñeteros los unos con los otros.
Mis mejores deseos, Maite.
Tuis intenciones y tus obras son buenas, Nino. Te deseamos un feliz 2024 (a ver si nos regalas on la publicación de un nuevo libro)!!
ResponderEliminarFeliz año, Ángela:
EliminarUna pena que no hayáis podido acercaros por Gijón. Confío en que ya esté todo solucionado.
En mis planes para este año no entra el autoeditar nada nuevo. Sí que seguiré practicando con formatos y diferentes posibilidades editoriales de Amazon.
Mis mejores deseos, Ángela.
Sinceridad, crítica, buenos propósitos...me ha gustado este alarde social o antisocial je, je, y sobre todo porque tu texto denota a una buena persona detrás de la pantalla. Si te sirve de algo estimado, Nino, te diré que mis migrañas arrastradas desde niño fueron diluidas por la tóxina botulínica aplicada cada tres meses en neurología. Bendito invento.
ResponderEliminarAbrazo y buen 2024.
Feliz año, Miguel:
EliminarNo sabes cuánto me alegra el que ese tratamiento con bótox haya diluido tus migrañas. A mí me inyectaban “sumatriptán” cuando iba a urgencias ambulatorias, pero era muy tóxico. La última vez que me lo inocularon fue en julio del 2019, desde entonces no he vuelto al ambulatorio –prefiero aislarme en casa–.
Gracias por empatía y valoración positiva. Leerte es siempre una inyección de energía positiva.
Mis mejores deseos, Miguel.
Comunicarse es bueno. Un beso
ResponderEliminarFeliz año, Susana:
EliminarSoy persona comunicativa, incluso en lo involuntario; pero ante todo soy selectivo, también en mis intercomunicaciones.
Mis mejores deseos, Susana.
¡Hola, Nino! La vida es lo suficientemente larga como para ofrecernos etapas de recogimiento, en las que intimar con la Soledad es nuestro mayor deseo, y otras en las que decidimos abrir la puerta. Pienso que nada malo hay en ello, son cosas que nos pide el cuerpo, que es muy sabio, en cada momento. Así que sea la fase en la que te encuentres, lo importante que es te sientas cómodo y sepas aprovechar lo mucho que nos dan ambas. Un abrazo y feliz año!!
ResponderEliminarFeliz año, David:
EliminarMi tendencia al aislamiento es innata y, a la par, forzada. Tengo gran facilidad para abstraerme en entornos aburridos u hostiles. Pero también ha sido un método de defensa para evitar ser dañado en interacciones forzadas. Lo curioso es que este aislamiento que resulta de mi incapacidad de interacción es ocasionalmente malinterpretado como capacidad de liderazgo o muestra de soberbia.
En ciertos contextos me proyecto en una personalidad que me permite el desempeño de un cometido laboral o social. Por ejemplo: en trabajos de supervivencia suelo identificarme como “Marcelo” ("...He works hard for the money"); o no tengo redes sociales pero sí que las tiene mi personalidad creativa “Nino Ortea” (...He is so vain").
Mis mejores deseos, David.
Hola, Nino. siento llegar con retraso, por culpa de mi reloj biológico. Días felices se acercan. ¡Feliz año nuevo!
ResponderEliminarFeliz año, Pablo:
EliminarAcompasar la marcación de nuestros diferentes relojes vitales no es tarea fácil. Me cuesta mucho llegar a tiempo a actividades de etiqueta social (no reparo en cumpleaños o santos, ni en posicionamientos sociales). Aquí, siempre llegas a tiempo.
Mis mejores deseos, Pablo.
En cierto modo te entiendo, las personas "me dan pereza".. el problema es que hay días que también me da pereza mi persona, y ahí se entra en una espiral peligrosa. Para mi también es un ejercicio intentar comunicarme más, aunque sea siempre un poco desde la distancia, me cuesta acercarme demasiado, pero creo que merece la pena.
ResponderEliminarDe no haberte comunicado, Flor, no te habría dado un cogotazo para ponerte en la dirección correcta, ¿no?
Feliz año, Beauséant:
EliminarLa comprensión es mutua: el confinamiento pandémico llevó a que muchos descubriesen aspectos de sus interacciones sociales o personales en los que flojeaban, unos pocos simplemente vimos confirmadas nuestras limitaciones. Sin hacer un elogio de ella, la pereza forma parte de mi modo de actuar, sobre todo en aspectos personales.
Sí. Lo de Flor no fue un cogotazo, fue un abrazo. Su esfuerzo por buscar una entrada en la que yo admitiera comentarios (lo perezoso habría sido esperar por un nuevo texto) me ha llevado a comprender que no tiene sentido el que, con asiduidad, publique entradas que no admiten comentarios (como pasaba con aquellas en las que agrupaba mis comentarios en vuestros blogs). Son entradas que no tienen valor informativo o divulgativo, son reflejos comunicativos y, como tales, si no admito la interlocución no tienen sentido.
Mis mejores deseos, Beauséant.
Te deseo lo mejor del mundo y lo que te haga feliz disfrútalo!!!!
ResponderEliminarabrazos
siempre
Flor es una buena amiga, con inteligencia emocional.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Demiurgo:
EliminarConfío en que estés bien.
Sí, Flor es muy buena persona y una amiga insuperable.
Un abrazo, Demiurgo.