El contenido literario de este blog está registrado en Safe Creative

El contenido literario de este blog está registrado en Safe Creative
Mis mejores deseos para ti y los tuyos, amable leyente, ahora y siempre

martes, 6 de junio de 2023

Cambio copernicano

Quizá Bob Dylan tenía razón cuando escribió que los tiempos están cambiando (The Times They Are A-Changin’, 1963).


Basta con mirar el cielo para corroborar que el tiempo está cambiando: hoy, en el norte de España brilla el sol y en el sur español graniza.

Si aprovechamos este sol para salir a la vida exterior, comprobaremos que ésta, efectivamente, ha cambiado: ha envejecido. En los parques de nuestra niñez deambulan ancianos y en los patios escolares nuestros abuelos practican yoga. Donde antes correteaba la vida ahora se esquiva la muerte. Todo un cambio, ¿verdad?

Si nos acercamos a cualquiera de nuestros mayores, deambulantes o practicantes, nos confirmará que los tiempos han cambiado y que los de antes eran mejores: sin achaques de salud y sin ataques de Putin.

Oteados los cielos y consultados nuestros abuelos, todo indica que Dylan acertó en su aforismo musical. Pero tener la razón en lo que dices no implica tener acierto en lo que haces: en la vida impera el caos, no el orden, de ahí que convenga convivirla con un gramito de locura y un quintal de suerte.

Nunca me gustó la música del estadounidense Bob Dylan; y soy demasiado viejo como para cambiar de pellejo.

Una de mis debilidades es la música de Enrique Urquijo. Pese a su muerte, cualquiera de sus estribillos me hace sentir más vivo que toda la discografía de Dylan. Estímulo que no ha cambiado en los 45 años que llevo escuchando sus canciones.

Va por ti, amable leyente: gracias por estar ahí. Han pasado casi quince años y tu compañía en este blog me hace volver a ser el niño que nunca ha dejado de preguntarse el porqué de las cosas.

“Después de andar a la deriva

Por mares turbios de bebida

Como un chiquillo falto de cariño

De pronto es todo tan sencillo, sencillo.”



26 comentarios:

  1. La vida es ondulante, los tiempos cambian y nosotros cambiamos con el tiempo. La adaptación al cambio es una de las formas más inteligentes para sobrevivir.
    La población ha envejecido notablemente y quizá tendremos que plantearnos la planificación urbana, la conversión de muchas escuelas en geriátricos.
    Los niños aportan alegría y los viejos experiencia.
    ¡Ah Dylan!, Mr Tamburini, los tiempos están cambiando, pues sí, como siempre, nada nuevo bajo el sol.
    Muchas gracias por tu recomendación.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Francesc:
      Tu definición me parece tan plástica como acertada: la vida es un desierto de dunas o un océano de olas, de ahí que convenga atravesarla acompañado para que no te traguen sus ondas.
      Uno puede creer que transita inmutable los desiertos y océanos, que lo que siempre le ha funcionado nunca dejará de hacerlo, pero un día se encuentra con que su barca queda varada en la arena y su camello se ahoga en el agua. Hay que saber cambiar los soportes para sobrevivir en el medio.
      Al envejecer me he ido dando cuenta de las grietas de la sociedad en la que vivo, en mi juventud anidaba en una cúpula sin fisuras.
      De Dylan a Dickens: “fue el mejor de los tiempos, fue el pero de los tiempos”.
      Gracias a ti por tu compañía en este desierto oceánico, Francesc.

      Eliminar
  2. A mi sí me gusta la música americana, bueno, músicos sobre todo norteamericanos, sin embargo Dylan nunca me ha gustado, vale que sus letras son muy poéticas y todo lo que quieras pero tiene voz de gallina clueca jajaja sin embargo como a ti, me gustaba muchísimo ENRIQUE URQUIJO, una pena que se nos fuera... aunque tú no lo sepas, es una de las cnaciones más preciosas que existen y sí... empiezo por el final, para que veas que ordenada soy.. la vida está cambiando, aunque no precisamente para bien, esa parte de que los abuelitos hagan yoga en los coles bien, lo malo es que se mueren solos en los asilos y cien mil cosas más que no gfunicona en este mundo donde todos tenemos taan pero taaan mala memoria. Me ha gustado mucho este texto y la música .. jaja todo!

    Ooootro abrazooo fueeerte NINO!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, inadjetivable MARÍA:
      Soy un devoto de la música estadounidense. ¿Qué habría sido de mi infancia sin escuchar a mi madre canturrear canciones de Elvis? ¿O de mi adolescencia sin tararear “aguambabaluba”? Ya viejo, mi pellejo se convierte en piel rejuvenecida con sólo escuchar a The Weeknd. Siempre he querido ser un número 1 en USA. Pero…
      …Al igual que el ser omnívoro no conlleva que coma de todo (tragar siempre se me ha atragantado), el ser yanquiculturizado no me lleva a admirar todo lo que allí es adorado. A Bob Dylan no lo he querido ver ni gratis (literalmente) y escucharlo lo evito (drásticamente): su música no me activa y me cuesta entender sus letras.

      Respecto a Enrique Urquijo y su “Aunque tú no lo sepas”, ésta es la entrada que le dediqué a la canción, al creador y a mi madre; a mi querida e inolvidable madre, a su querida e inolvidable música:
      https://venyenloquece.blogspot.com/2019/02/aunque-tu-no-lo-sepas-enrique-urquijo-y.html

      El cambio, aunque no lo sepamos, forma parte de nuestra vida. Adaptarnos a él es tan primordial como el aprender a nadar a contracorriente en nuestro mar Cantábrico: el agua es vida, pero nos podemos ahogar en ella.

      Bueno, inadjetivable MARÍA, te invito a bailar al son de su “Agárrate a mi María”. ¿Te apetece?

      Eliminar
  3. Hola, Nino.
    Estos cambios en el tiempo nos traen a todos locos y los que sufren los ancianos me dan mucha pena. Te ha quedado un texto muy intimista. Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Ángela:
      El pronóstico de la AEMET era el de lluvia y tormentas a esta hora y en este sitio. Aquí y ahora brilla el sol y la tormenta sólo está en mi cabeza. Los ancianos no me dan pena, los gestores de los servicio públicos para ancianos sí que me dan… VERGÜENZA.
      Un abrazo, Ángela.

      Eliminar
  4. Yo también lle o quince años. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Susana:
      Gracias por tu visita y comentario.
      ¡Pues que cumplas muchos más, compañera!

      Eliminar
  5. A mi me gusta toda la música en general, pero reconozco que las canciones del Dylan, me suelen gustar mas cuando las canta otro. El ya se sabe empezó desafinando a adrede y terminara igual.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Erik:
      Soy caprichoso. Nada me gusta en general y poco en particular. Uno de los músicos que me es más particular es Bryan Ferry, pero no he vuelto a escuchar su “Dylanesque”.
      Por lo que he leído, el concierto que Dylan dio ayer en Madrid despertó opiniones muy dispares entre los asistentes.
      Un abrazo, Erik.

      Eliminar
  6. Los tiempos están cambiando siempre es una frase que en boca de un joven suena ilusionante y en los labios de un anciano a una derrota anticipada... depende de si te encuentras al principio o al final de algo, como todo ...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Beauséant:
      Con el tiempo ocurre lo contrario que con el viento: cuando lo tienes de cara no quieres que cambie. El declive físico-neurológico que acompaña al paso del tiempo hace que se anticipe esa derrota que mencionas.
      Un abrazo, Beauséant.

      Eliminar
  7. Me ha sorprendido el título y he comprobado si Bob Dylan tiene alguna canción dedicada a Copérnico. No es así, verdad? Besos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Maite:
      Agradezco tu interés y me disculpo por las molestias que mi torpeza expositiva te ha causado. El “giro copernicano” al que me refiero, tiene que ver con la aplicación filosófica que Kant hizo de la teoría astronómica de Copérnico. Creo que Kant sostiene que primero ideamos y luego buscamos realidades que encarnen nuestras ideas.

      Respecto a las composiciones de Dylan, no tengo ni idea de sus vínculos con la astronomía.
      Un abrazo, Maite.

      Eliminar
    2. He olvidado todo eso de la filosofía. Menuda memoria tienes Niño. Besos!!.🥰

      Eliminar
    3. Hola, Maite:
      Más que cuestión de memoria, lo es de voluntad: intenté leer a Kant ya de viejuno, en el instituto fui un mal alumno de Filosofía.
      Un abrazo, Maite.

      Eliminar
  8. ¡Hola, Nino! Cuando escucho cosas como la maravillosa tecnología digital, que tanto tiempo nos ahorra y tanto nos facilita las cosas; o los avances en medicina, educación, etc, etc... Siempre respondo que, en lo personal, no soy hoy más feliz que en los ochenta y pienso que eso es extensible a mucha más gente, a juzgar por el aumento de patologías depresivas, suicidios y frustraciones. Tampoco veo que ese supuesto ahorro de tiempo tenga alguna concreción práctica dado que no me he encontrado a nadie que diga que le sobra tiempo. En fin, cosas de los nuevos tiempos. Lo que sí tengo claro es que el futuro siempre serán los niños, y no una sociedad avejentada. Creo que si dejamos de tenerlos y nos decantamos por los mayores la cosa pintará negra y eso que cada vez me acerco más a la vejez. Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, David:
      En la década de los años 80 se consolidó mi personalidad. Además de disfrutar de una salud a prueba de descuidos, viví sin problemas gracias al esfuerzo de mis padres. Fueron otros tiempos. No sé si mejores de manera objetiva, pero sí que lo fueron de manera subjetiva. No puedo compararme con el que fui, de ahí que no pueda comparar con equidad el pasado con el presente.
      Sí que puedo comparar la interacción social analógica con la digital, y me quedo con la primera: en la pasada, nadie se quedaba fuera de ella por ser analfabeto funcional; en la actual, ser analfabeto digital conlleva ver limitado el ejercicio de tus derechos y obligaciones (el día en que la declaración de Hacienda se limitó a su gestión web quedó claro que nuestra forma de interactuar había cambiado). Veo en lo digital más desventajas que ventajas, la verdad.
      Los niños presentes suelen ser descuidados por las sociedades, ya que determinan su futuro basándose en experiencias pasadas. Quizá uno de los ejemplos más claros de ese conductivismo caduco esté en esos docentes de que ponen a sus alumnos de primaria canciones de The Beatles para aprender inglés.
      Un abrazo presente, David.

      Eliminar
  9. Me parece una buena aptitud la de no dejar de preguntar el porqué de las cosas.
    Un músico talentoso, inspirado, puede hacer que su música siga viva, después de su muerte.

    Me gusta pasar por acá. Saludos.-

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Demiurgo:
      Y a mí me gusta tenerte por aquí, contar con tus comentarios afectuosos.
      Desde siempre he sentido una curiosidad por la vida, por lo extraordinario de las cosas que damos por cotidianas hasta que un día ya no nos ocurren.
      Un abrazo, Demiurgo.

      Eliminar
  10. Hola Yogurín, ahora me doy cuenta de que yo soy un año más vieja , y que cuando éramos niños , era yo la que te sacaba de tus pequeños problemas como cuando aquella vez fuimos calle abajo en busca de tus canicas que rodaron y rodaron , porque se rompió la red donde iban las canicas,¿ Te acuerdas? Ensoñaciones aparte imaginándote de niño que me hubiese gustado verte ,e hago una ligera idea de lo que eres ahora de adulto .
    Un ser encantador con un alma limpia y bondadosa .
    Los secretos que me vas a contar que no haya cantado a Capela muchas de sus canciones , yo también soy de los secretos , Bob Dylan me queda muy lejos es como el Boos de Bruces Pristing.
    Recuerdos y besos a frambuesa y a ti.... Remiaú!!🥰🥰🥰🌸

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Flan!
      Ni tú ni yo somos productos con fecha de consumo preferente, así que la edad sólo cuenta cuando echamos cuentas de lo mucho que llevamos descontado y de lo muchísimo que nos queda por contar y cantar.
      Ahora que lo recuentas correr tras aquellas canicas rodadoras fue un grato aprendizaje para mi correr tras “eztoz mardito roedore”. ¡Que la vida de los gatos siempre es presentada como muy perra en los dibujos animados!
      Mi ser es un reflejo que quienes sois a mi lado: en tu compañía sólo puedo ser limpio y bondadoso. Y sí la condición de adulto no me ha adulterado en exceso (ventajas de haber vivido con más suerte que cabeza)
      No es secreto que “Ojos de gata” es una canción muy minina, ¿verdad aristogata?
      Dylan es… es… es indescriptiblemente bostezante. Springsteen no me adormece, pero no es mi de lejos lo que me acerca a lo que entiendo por música ninosquera.
      Estos días estoy ocupado editando una antología de textos que ha seleccionado Clarisa: en su selección figura nuestro “Cegato” (lo que atestigua su excelente vista lectora).
      Saludos frambueseantes, amiga.
      ¡Reeeemiaú!

      Eliminar
  11. Fíjate donde he tenido que bajar para comentarte, desde la ultima entrada que no admute coemntarios ...

    ¿Tú sabes el susto que me has dado? Jaja según entro y veo tu contestación a mi comentario, me han entrado unos calores que … jaja se me han pasado cuando he visto que el mío es uno de alguno de los comentarios que has contestado y colgado aquí en tu blog. Verás, te voy a confesar algo ahora que nadie nos escucha, no llevo demasiado bien los halagos, me explico, como a todo el mundo me gusta sentir el cariño, la simpatía y que me traten bien, eso lo deseamos todos, pero me aturden mucho los halagos, soy tímida y no sé reaccionar con naturalidad y no es falsa modestia, sencillamente no sé gestionarlo con soltura, es más, parezco idiota perdida, como cuando te sueltan un piropo, solo deseo meterme debajo de una losa y que nadie me vea ; ) por eso a veces tú, que eres siempre tan hipergeneroso me apabullas y por eso he empezado el comentario como has visto. De ser bien nacidos, es ser agradecidos y te aseguro que agradezco infinito todo tus detalles, pero no sé cómo corresponder, así que no sé qué decirte. Sé que tienes la idea de editar un libro con todas tus contestaciones, la verdad es que te lo he dicho, realmente dejas comentarios preciosos y puede ser bonito que los recopiles, por la parte que me toca te aseguro, como te he dicho que te agradezco enormemente el cuidado e interés que muestras cuando comentas, al final ese es el mayor halago que nadie puede hacer aquí, que se intereses por lo que haces y se haga cómplice contigo de lo que compartes, así que lo dicho de corazón gracias y un abrazo muuuy fuerte que te haga llegar mi simpatía por ti y que si finalmente lo editas tengas tanta suerte como mereces, toda!

    Que tengas una buena semana y que esa edición de tu libro y de CLARISA a la que tb hace siglos no veo - transmítele mi recuerdo- os quede de maravilla!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, MARÍA:
      Con mis palabras busco trasmitir aprecio. Halagar no es nunca mi pretensión, al igual que no lo es practicar la falsa modestia o trasmitir envidia sana. No soy envidioso, modesto ni halagador. Otra cosa es que mis actos puedan ser interpretados así.
      Lamento el que la reproducción de mi comentario te haya asustado. Llevo años reproduciéndolos de una manera u otra en el blog: antes hacía una publicación mensual con una selección de mis comentarios; pero cada vez leo-comento menos blogs, por lo que ahora reproduzco sin seleccionar todos los que previamente me acuerdo de guardar. Fue una práctica que inicié como salvaguarda ante el uso de la moderación de comentarios en vuestros blogs, medida que me crea inseguridad sobre el destino de mis palabras.
      La antología realizada por Clarisa sobre mis textos en este blog va consolidándose. Rondará las 300 páginas. Así que estoy ejercitando al máximo ni capacidad de atención (este ejercicio y sus beneficios son, junto al agradecimiento a Clarisa, mis estímulos en momentos de cansancio visual y mental frente a la pantalla). Me queda poco para acabar la primera versión. Por cierto, ha seleccionado una entrada que te dediqué y reproduciré los dos comentarios que aportaste en ella: https://venyenloquece.blogspot.com/2022/12/a-ti-maria-y-todos-nuestros-companeros.html.

      Gracias por tu visita comentada, MARÍA.
      Lo mejor para ti y los tuyos.

      Eliminar

Gracias por tu lectura comentada.

Entradas populares