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Mis mejores deseos para ti y los tuyos, amable leyente, ahora y siempre

viernes, 6 de octubre de 2023

La burla del diablo

En mañanas como la de este viernes de nombre otoñal y apellidos veraniegos, siento escalofríos al recordar ciertos fulgores recientes con los que busqué negar mi estación de invierno.


Quizás quería volver a ser ese Mefisto que le vendió su alma a Belcebú a cambio de 58 años de felicidad; y que –cuando Leviatán se presentó a cobrar su deuda– lloró hasta lograr apagar los fuegos de El Infierno. La sensación de haber burlado al Diablo tras haberle entregado mi alma de barro, se desvaneció al ver su reflejo en el fondo de una botella. Me había encontrado. Me miró con ojos sabios, y viviseccionó mi cuerpo hasta llegar a mi espíritu. Sacó mi luz y le adhirió una mota de oscuridad. No dijo ninguna palabra. Perdonó mi inconsciencia de creerme por encima de El Bien y El Mal.

Supongo que es poco el precio que llevo pagado por ensoñarme inmortal. Otros, mejores que yo, lo han perdido todo. Yo sólo pierdo ocasionalmente la razón.

Esa mácula que me ha producido mi gusto por lo desmedido, es visible en diferentes cicatrices que tatúan mi piel. Mi maldición eterna era mi incapacidad para la estabilidad, para estarme quieto o saber esperar. Todo me aburría, todos me cansaban. Me falta la fuerza del interés para luchar por nada o por nadie.

O eso creía. Hasta que llegó ella; y decidí urdir una burla al Diablo de la monotonía y embarcarlo en un buque sin retorno rumbo a Mombasa, mientras me quedo en casa junto a la alegría “jusqu'au bout du hasard” (1).

Fotografía de Anna Karina.



25 comentarios:

  1. (1) “Jusqu'au bout du hasard”: Expresión francesa –que traduzco libremente por “Hasta que se acabe la racha”– que da título a la última novela de una Anna Karina que me recuerda vívidamente mi frugal “Frambuesa”.

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  2. Hola, Nino.
    Perdona, pero no le pillo el giro a tu texto. Es un homenaje a la película o un relato tuyo? Besos!!

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    1. Hola, Maite:
      Soy yo quien debe disculparse por haber escrito un texto tan pillo: de la película toma el título y el destino a Mombasa, el resto es pleno pretexto para mi niniedad.
      Un abrazo, Maite.

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  3. jaja te leo, leo a MAITE y la verdad es que aunque es verdad que resultas un poco encriptado creo que en tus letras te refieres a que estás apostando por una relación que espero sea tan reconfortante y fructífera como lo son tus intrincadas letras y que ese diablo se quede quieto y tú sigas tan inquieto en letras como en persona y no dejes de escribir, aunque no seamos capaces de pillarte : )

    Abrazo fuerte y aunque todos vayan tras el uranio... que tú encuentres el tuyo: )

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    1. Hola, MARÍA:
      Encantado de leer tu comentario, aunque más lo estaré de leerte en tu blog. Me alegra tu regreso, compañera.
      Pues me tengo que esforzar, para pasar de ese poco que mencionas a un todo que ambiciono: enninado (adjetivo: dícese del sinsentido encriptado por Nino como genialidad para guardar en una cripta su trivialidad).
      Soy de natural trincón, pero mis letras más que intrincadas las prefiero a pagar por el portador, para que así sea el lector que le aporte capital a un escrito insustancial.
      La quietud me produce inquietud, cual silencio que antecede a tormenta.
      Que ellos se vayan a Urano, yo prefiero transportarme a Venus.
      Un abrazo, estimulante MARÍA.

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  4. Tu texto es algo encriptado, como comentan. Pero encriptado como suele serlo una prosa poética.
    El Diablo de la monotonía, si que debe de ser malo. Engañarlo es un logro.
    Saludos.

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    1. Hola, Demiurgo:
      Son mis limitaciones las que me vuelven encriptado (ni conceptista, ni culteranista, soy un simple ninista).
      Una vida rutinaria puede cobijarnos de los demonios del desánimo o la autodestrucción, pero la vida monótona nos transforma en endiablados seres grises.
      Y el gris no es tu color -ni el mío-, cromático Demiurgo.

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  5. Querido Nino, la verdad sabe más el demonio por viejo que por diablo y querer engañarlo como bien dice Demiurgo es muy difícil, y más si este te tenta con una dulce y sabrosa frambuesa , yeso de la monotonía va por barrios , te digo que mis padres llevan casados 50 y pico de años casados y van a ratos parecen niños pequeños , por rabietas que cogen pero se siguen queriendo como el primer día padre tiene 76 y mi madre 75 , así tú que eres escritor dicharachero , saca tu imaginación y dejala volar , y conquista a tu bella dama.
    Te deseo un feliz fin de semana para ti y tu costilla.
    ¡¡ Remiaú!! Besos de flor 🌸🥰

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    1. Querida, Flor:
      Te leo y siento cómo los demonios del desánimo me abandonan, eres una exorcista de lo endiablado. Es una bendición contar con tu compañía.
      La edad erosiona, de eso estoy seguro: me lo refleja mi espejo. ¡Y menuda diablura es la de envejecer!
      La edad alecciona, pero no siempre para bien. En mi caso, me he acostumbrado a vivir solo y me cuesta convivir (quizá no de parvulitos, pero sí que tengo nivel de instituto en ese aleccionamiento).
      Me alegra esa felicidad activa de tus padres. El que su convivencia tenga esos momentos de desencuentro, habla de que los dos luchan por su amor y alejarlo de la monotonía.
      El fin de semana ha resultado viajero, aprovechamos este verano a destiempo para ver lugares a tiempo.
      Un abrazo refrescante, compañera Flor.
      ¡Remiaú!

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  6. Quien pacta con el diablo tiene todas las de perder.

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    1. Hola, Erik:
      En vez de pactarlo, intenté plantarlo… Pero creció un árbol sombrío que me alejaba de la luz del sol.
      Un abrazo, Erik.

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  7. Soy Ángela. Esta tarde Google va fatal, no me ha dejado ni acceder a mi correo. He visto esta peli, me encanta Bogart, y es evidente que juegas con su trama como en un jeroglífico. Un beso! 😘

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    1. Hola, Ángela:
      Gracias por vencer las fatalidades "gugleísticas" y pasarte a venyenloquecer.
      La peli la descubrí en un ciclo de La 2 sobre Jennifer Jones.
      Lo mío no era plantear un jerogífico, sino compartir un pasatiempo. Quizá lo pasado sea mi tiempo de escritor.
      Un abrazo, Ángela.

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  8. Hola, Nino. Una tarde tranquilla de lectura blogueril me lleva a disfrutar de tu "ninismo". No conozco a nadie que no haya hecho propuestas para conseguir ciertos objetivos a cambio de cosas inverosímiles. El infierno está en nosotros desde ese mismo instante. Como ves, tu texto da para muchas interpretaciones. Aquí te dejo la mía, amigo.

    Mil besitos y mi cariño para comenzar una buena semana ♥

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    1. Hola, Auroratris:
      Gracias por el regalo de tu interpretación lectora.
      Confío en que tu día de hoy esté resultando tranquilo; quizá no tanto como la tarde de ayer, pero sí que no te trasmita la sensación –tan común entre nosotros– de tener “La vida en un hilo”. Por cierto, amiga: me permito recomendarte la visión de está película en su versión original de Edgar Neville. Está en el catálogo online de eFilm (ya sabes: acceso gratuito con el carnet de la biblioteca).
      Un abrazo, Auroratris.

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  9. Mientras pierdes o no la razón, veo que los nombres de que te rodeas tienen sustancia de sobra. De Houston a Bogart, calidad.
    Un saludo desde el mar.

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    1. Hola, Ana:
      Tienes razón en lo de mi intermitencia en la pérdida de la cordura (la apostura, se puede apostar a ganador, la perdí hace tiempo).
      Las películas de John Huston me suelen gustar: sus personajes perdedores me acercan a mi persona. Bogart despierta en mí diversidad de opiniones. Pero está película me parece muy chispeante.
      Un abrazo, Ana.

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  10. Hola, Nino:
    Yo no creo que seas críptico, eres personal. Muchas veces te leo y no sé que puedo comentar, pues me parece que escribes para ti, para entenderte más que para que te entiendan. Además juegas mucho con las palabras y de manera muy personal, probablemente en ese componente uncosncious del que hablas en inglés. Yo pienso que al diablo que quieres burlar es la vejez.
    Saludos.

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    1. Hola, Pablo:
      Gracias por tu comentario clarificador.
      Aciertas: escribo para mí. Pero publico para TODOS. Publico con el anhelo de que me disfrutéis la totalidad de quienes me leéis. Por lo que el que este tipo de comentarios me son de ayuda: no soy críptico, no me sé desenvolver en lo críptico (entendido como aquello que requiere un conocimiento previo que actúa como código para interpretarlo). Creo que este ensimismamiento es fallido (la falta una parte para ser comprendido).
      Sí, me gusta jugar con las palabras con su colocación en una frase o su sonoridad al leerlas.
      Gracias, Pablo.

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  11. Me encanta la vuelta de tuerca que da el texto cuando llegas al final. Felicidades. Te mando un beso.

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    1. Hola, Sanhoycal:
      Pura casualidad: estoy releyendo “The Turn of the Screw”, de Henry James. Hace años que tengo atascada la escritura de una novela sobre la dualidad y quizá en James encuentre una pista sobre cómo concluirla. Así que esta “vuelta de tuerca” que mencionas me ha apretado las tuercas.
      Un abrazo, Sanhoycal.

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  12. Me hiciste recordar con tu buen texto, alimentado en la película de Huston, al personaje de la novela de Carrasquilla, Peralta que era un hombre hábil, y le jugó el alma al diablo pero Peraltica que perdió buscó la manera de engatusar a la muerte, y cuando vino a llevárseló la hizo subir a un aguacatillo, donde le había preparado una horca. Un abrazo con gran aprecio colombiano. Carlos

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    1. Hola, apreciado Carlos:
      Gracias por vincular la sensación que te ha producido la lectura de este divertimento, con la que te produjo la de la obra del gran Tomás Carrasquilla.
      Mis demonios están siempre ahí; pero, por suerte, hasta ahora he logrado engatusarlos sin apenas haber sufrido unos arañazos más o menos profundos.
      Un abrazo, Carlos.

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  13. Hola, Nino: Bonjour!
    Es cierto que a ti hay que leerte despacio y después volver a leerte, je... No hay otra manera de poder apreciar tus textos ricos y bien sabrosos. (perdona si te comparo con un buen guiso) y es que a veces de tan especial sabor son tus textos que no quiero que acaben y deseo repetir, je... (Sabes, estoy cocinando y a la vez te leo y te escribo, de ahí la idea 😉 )
    Si te digo que la razón, un poco y ciertos momentos, también la pierdo y los motivos no importan porque hay tantos... Pero lo más importante es que no has perdido tu objetividad, y sabes muy bien que jamás te venderías a la mediocridad. Y si el diablo se burla, pues le haces unas llaves verbales de estas que tú sabes ya no podrá desenredarse... je Me encanta tu manera de airear tus locuras para hacernos enloquecedoramente felices al leerte. Me encanta que no pierdas la esperanza y mandes a la monotonía al diablo, y disfrutes de esa racha de buena suerte, hasta que dure...
    Un abrazo grandote, nuestro amigo y disfruta el momento que te trajo tu cumple. 🌞

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    1. Hola, cocinante Clarisa:
      Hasta aquí llega el aroma estimulante de tus preparados, tan deliciosos como sugerentes.
      Suelo leer los textos en voz alta antes de publicarlos (es una costumbre que adquirí en mis tiempos escolares, para así evitar que la sonoridad de lo escrito me llevara a problemas) y suelo hacerlo de manera pausada (así parecía que había escrito más si me tocaba leer en clase). Me temo que en estos tiempos de lectura por dispositivos móviles, mis textos son estáticos. Sé que son largos, tiendo a la digresión, y que no uso un vocabulario mundano (pero es mi registro).
      Con estos ingredientes tan peculiares, son quienes me leéis los que lográis confeccionar un buen plato lector. Es vuestro el logro creativo. Habilidad similar a la innata en quien pese a comprarle al tendero “ninero” unas patatas, cebollas y huevos ramplones, logra confeccionar una tortilla sabrosilla.
      Creo que soy endiabladamente subjetivo, de ahí mi excentricidad. Un Falstaff que suele hacer suyo aquello de "The world is my oyster".
      Lo que creo que le molesta al diablo es mi despiste objetivo me impida ser objeto en su infierno de detalles. Despiste persistente que me ha llevado a situaciones enloquecedoras, de ésas que sonrojan dependiendo de cómo se acojan. O de cómo se preparen. Ya que en buenas manos lectoras, hasta un despropósito puede ser merecedor de elogios; al igual que un par de huevos fritos pueden resultar exquisitos.
      Gracias por ayudarme a mantener el apetito creativo y a saciar mi voracidad lectora, guisandera Clarisa.
      Bon appétit!

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Gracias por tu lectura comentada.

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