-->
Pero bueno, no estoy aquí para divagar sobre afectos o desafectos; si no para compartir con vosotros otra buena noticia, la segunda en menos de 24 horas —yo sí que molo, y no el tiritas de Jack Bauer—.
Veréis, mis queridos enloquecidos, el narrador gráfico Eddie Campbell ha vencido su tendencia a postergar lo remunerado frente a lo gratificante y ha agrupado en un tomo —Alec Omnibus: The Years Have Pants— sus sueños, vivencias y decepciones presentados bajo el heterónimo de Alec. Discurso en tercera persona que le permite el narcisismo de dibujarse eternamente joven. Aunque estoy seguro de que Eddie nunca reconocería su dandismo, y hablaría de “un sentido homenaje al trabajo de Bill Finger con Batman: siempre impoluto y en combate victorioso con Kronos”.
El libro saldrá a la venta este septiembre, pero ya se encuentra disponible para presolicitarlo en catálogos de material de importación, y me imagino que también en alguna que otra librería por Internet. Para la ocasión, la editorial Top Shelf —colaboradora habitual de Campbell cuando no se autoedita sus obras— ha pedido al diseñador gráfico Eric Skillman que confeccione la cubierta de la antología tanto en su edición en rústica como en tapa dura.
Alec: The Years Have Pants incluye en sus 640 páginas todos los relatos previos del personaje —The King Canute Crowd, Graffiti Kitchen, How To Be An Artist, Little Italy, The Dead Muse, The Dance Of Lifey Death, y After The Snooter— junto a toda una serie de cuentos, que ya había recogido el autor en su autoedición en forma de cuatro volúmenes del año 2.000 al 2.002.
Este omnibus incluye 90 páginas sobre el personaje realizadas por Eddie tras la publicación del último tomo de su antología, 45 de ellas nunca antes han sido publicadas y conforman la historia The Years Have Pants.
Perdona si soy demasiado directo; pero, mi cumpleaños es en septiembre. Si no sabes qué regalarme, cómprate Alec: The Years Have Pants, léelo y envíame tu opinión al respecto —ninortea@hotmail.com—. Será el mejor regalo que puedas hacerme.
Salud y suerte a todos.
©Nino Ortea, Gijón, 30-VI-09.