Poco
antes de las 7 de la tarde me conecté a Internet con la intención de buscar
información para intentar darle forma a mi nuevo proyecto literario. Al acceder
a la edición digital del diario El País –mi actual página de inicio–, me
impactó la noticia de un atentado terrorista en Barcelona: un atropello a causa
del que se informa que, en el momento de escribir estas líneas, llevan fallecidas
trece personas. Mientras escribo mantengo activa una señal de audio en directo,
cuya audición me está transmitiendo una sensación caótica y mi preocupación
aumenta, mientras me pregunto qué hacer.
No
puedo evitar mantenerme a la escucha de lo que es una retrasmisión sonora confusa:
no hay ninguna voz retransmitiendo y lo que se escuchan son sonidos de la
calle, a la vez que las voces de periodistas y de ciudadanos a los que
entrevistan. En una situación tan crítica para nuestra sociedad, me pregunto si
el mantener mi intención de buscar información sobre la que crear ficción no es
una muestra de un carácter sociópata. Pero creo que la vida no debe detenerse
ante estas desgracias. Lo que debo hacer es mostrar mi solidaridad con las
víctimas y mi repudio ante los terroristas, pero no puedo responder con miedo
ante quienes buscan causarnos terror, asustarnos, que dejemos de vivir en Libertad
y con Respeto.
Yo, MJOS, condeno el atentado y lloro por cada una de las
víctimas.
Yo,
Nino, hago lo que puedo por ayudar a crear una sociedad mejor. Y lo que
mejor puedo hacer es escribir historias de esperanza.
Un abrazo
a todos.
Hola Nino, no podemos vivir con miedo, me uno a tu repulsa... aquí bajo mis lágrimas de rabia y de impotencia...
ResponderEliminarLlevo toda la tarde consternada... no doy crédito, simplemente no puedo creer que el ser humano sea tan cruel.
Mil besitos en la tarde.
Buenos días, Auroratris:
EliminarYa de mañana, con el ánimo más templado y quizá algo embotado por la medicación contra la migraña, creo que mi mejor defensa de las libertades comunes es el ejercer la libertad individual.
Como español de casi 52 años sé por desgracia lo que es convivir con amenazas terroristas. Si antes no me impidieron vivir mi vida, no lo harán ahora.
Salgo a la calle, confío en que la lluvia avive mi ánimo.
Un abrazo sentido, Auroratris.
Qué horrible, yo también me enteré por internet de la noticia, y no tengo palabras... ¡no! no las tengo ante esta atrocidad me he quedado muda del dolor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenos días, María:
EliminarInternet forma parte de nuestra realidad cotidiana, de nuestras alegrías y horrores.
Las atrocidades aún nos enmudecen, nuestro mutismo habla de nuestra sensibilidad ante el dolor humano, nuestro silencio habla bien de nosotros como humanos.
Un fuerte abrazo, María.
Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarBuenos días, Tracy:
EliminarUn abrazo fuerte, compañera.
Lo que nos paraliza Nino, creo que es la incomprensión de semejantes atrocidades
ResponderEliminarlo que me paraliza es recordar a la vez el 11 M y tantos otros
tantas vidas sesgadas, tanto dolor , tanta herida que dudo que se cierre alguna vez
luego viene el grito, la protesta,
y ... más tarde el silencio de nuevo hasta que por desgracia ( me temo) vuelva a suceder
somos en general de frágil memoria ... salvo que nos toque la piel y el alma
un abrazo
Buenos días, MaRía:
EliminarSí, tienes razón: lo que nos paraliza es nuestra condición humana. Por suerte, pese a que durante siglos una parte de nuestra especie (la que usa el miedo y el terror para dominarnos) se ha dedicado a perfeccionar las prácticas de odio al diferentes y exterminio al diferente, la fuerza de los humildes prevalece.
La española es una sociedad que siempre ha vencido al terror, ahora no será diferente: nuestra arma reside en ejercer nuestra libertad: al igual que durante las atrocidades de ETA seguimos viviendo, lo haremos ahora. Ellos buscan forzarnos a cambiar nuestras vidas y convertirlas en un modo de vida único, sometido a su dictadura, está en nosotros defendernos.
Me temo que la herida que mencionas no se cerrará: simplemente cambiará de cuerpo, pero seguirá doliendo en nuestro espíritu colectivo.
Un fuerte abrazo, MaRía.
La realidad que vivimos me dejas pasmada de dolor
ResponderEliminarBuenos días, Mucha:
EliminarEse pasmo ante el dolor ajeno ha sido desde siempre nuestra esperanza de futuro como raza: somos humanos y nos duele el dolor de nuestros iguales.
Un fuerte abrazo, Mucha.
Ya deja de ser dolor para convertirse en parte de la vida
ResponderEliminarLos presidentes no son ya mas presidentes
y nosotros aceptamos lo que vemos.
Ya nadie sabe votar
o decidir
nos hemos convertido en robots
Cada uno vibra y se defiende por uno mismo
y si bien hay palabras que escribimos.. La gente le cuesta escribir lo que es.
Todo es falso si miras a tu alrededor ya nada es más es de verdad....Yo sigo creyendo en los reyes magos... eso me deja recomenzar a diario
Buenas tardes, Mucha:
EliminarGracias por tu renovado apoyo.
Sí, hay que mantener viva la ilusión. Yo creo en las personas buenas como tú, personas que con vuestra humanidad generosa tenéis un efecto positivo sobre quienes os contactan, incluso sobre los que os contactamos con un océano de separación.
Y sí, al igual que tú creo que nos estamos robotizando, nos deshumanizamos para formar parte de esa quimera en la que creemos que la tecnología nos hace mejores, cuando en realidad nos está llevando a una involución.
Un cálido abrazo, Mucha.
No tinc por!!
ResponderEliminarUn abrazo, -Nino.
Buenas tardes, Ángela:
EliminarGracias por tu compañía.
Un abrazo.