Que
no nos vengan con que hoy es un día de fiesta. Hoy –como ayer y mañana– es un
día de reivindicación.
No
hay nada que celebrar, a menos que seas de los pesebreros que hacen del
sostener una pancarta su modo de vida.
Si
eres de los que se traga un gobierno de izquierdas, es que no das una a
derechas: éste es un gobierno nepotista de trileros.
Nos
sobran los motivos para mantener animos combativos frente a los explotadores y
las sanguijuelas.
No
habrá razon, que no existiera ayer para salir a la calle hoy. A no ser que seas
de esos que hacen siempre lo que se espera cuando se espera que lo hagan.
Yo no bailo al son de sus
tambores.
Nino